Phnom Penh, 12 de julio. Corea del Norte precisa armamento atómico para contener las amenazas nucleares de Estados Unidos, afirmó este jueves el canciller norcoreano, Pak Ui-chun, quien defendió el derecho de su país a seguir lanzando cohetes como parte de lo que denominó programa espacial pacífico.

Durante una cumbre sobre la seguridad en Asia –que se celebra en Camboya–, Pak Ui-chun aseguró que el objetivo de Estados Unidos es eliminar la ideología política y el sistema que nuestro país ha elegido.

El lanzamiento de un cohete de largo alcance en Corea del Norte el 13 de abril profundizó las tensiones en toda la región y echó abajo un arreglo alcanzado con Estados Unidos el pasado 29 de febrero, en virtud del cual Pyongyang se comprometió a interrumpir las operaciones de enriquecimiento de uranio y suspender sus pruebas de misiles, a cambio de ayuda, básicamente en alimentos.

Estados Unidos y varios aliados consideraron que el lanzamiento del cohete el 13 de abril fue un ensayo de misil balístico, pero el gobierno norcoreano afirmó que se trató de un ejercicio para tratar de colocar un satélite en órbita, que finalmente fracasó.

Representantes de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur mantuvieron hoy una reunión, al final de la cual advirtieron que cualquier provocación de Corea del Norte (...) tendrá una respuesta firme y coordinada de la comunidad internacional.

Expresaron su profunda preocupación por el bienestar del pueblo norcoreano y la grave situación de los derechos humanos en Corea del Norte.

En su discurso ante la cumbre, Pak Ui-chun sostuvo que el uso de la bandera de Corea del Norte como blanco en los ejercicios militares realizados por Washington y Seúl son una prueba clara de las intenciones hostiles de Estados Unidos.

Advirtió que su país nunca renunciará a su derecho soberano de explorar y utilizar el espacio exterior y de desarrollar energía nuclear con fines pacíficos.

Según Pak Ui-chun, la eventual capacidad nuclear norcoreana reduciría los riesgos de una guerra atómica. Precisamos proteger nuestra soberanía de las constantes amenazas nucleares estadunidenses, apuntó.