En 1997 Calderón exhortó a no ser una alternancia de paso: hoy su peor miedo es una realidad
Lunes 2 de julio de 2012, p. 13
El joven vigía
, como fue bautizado Felipe Calderón cuando era dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), advertía hace 15 años con pesar: O somos capaces de generar un gobierno panista o seremos una alternancia de paso, un mero corrector transitorio
. Ayer se hizo realidad su temor: Acción Nacional fue arrasado
–como lo describieron los miembros del cuarto de guerra de Josefina Vázquez Mota, sobre su tercer lugar– y así tras dos sexenios perderá la Presidencia.
Entre los consejeros panistas que escucharon al Presidente aquel 2 de agosto de 1997, día en que hizo su premonición, no estaba Vázquez Mota, quien ni siquiera militaba en el blanquiazul. Ella llegó con la ola foxista. Este domingo, con la claridad de que no pudo alargar la estancia del panismo en Los Pinos, la candidata habló varios minutos por teléfono con Calderón. Gracias, Presidente, gracias Presidente
, escucharon algunos que decía al llegar a la sede nacional del blanquiazul.
Ella, como cabeza de los josefinistas, y él, de los calderonistas, antagónicos antes de la campaña e integrados de último momento, habrán hecho su balance. Aunque en su discurso la abanderada nunca mencionó a Calderón y lanzó una advertencia: Cada quien tendrá que hacer una valoración de lo que hizo y dejó de hacer: el partido está obligado a rencontrar su origen ciudadano y transformarse
.
El duelo
Los panistas sabían de la derrota, pero tenían la esperanza de lograr el segundo lugar, confiaban algunos. Con esta certeza, Vázquez Mota prefirió vivir el duelo en su casa, en Huixquilucan y al lado de su familia. Por eso la conversación con Calderón tuvo lugar alrededor de las siete de la noche, en el trayecto hacia la sede nacional panista.
Para cumplir con el ritual, quizá más por una cuestión de imagen, en el patio de la colonia Del Valle se montó un templete para el festejo, donde había luces, meseros, canapés y bebidas. Pero las señales eran claras. Los videos de la campaña se exhibían sin audio y el Huapango de Moncayo –ese que se escuchó cuando las rechiflas a Calderón en Bellas Artes– dejó de sonar como a las cuatro de la tarde. En el bar lounge VIP comenzaron a amontonarse los sillones, nadie los iba a usar.
A esa hora no había simpatizantes en las oficinas del partido, salvo los empleados. En el cuartel de la calle de Sacramento, Roberto Gil Zuarth, Max Cortázar, Juan Ignacio Zavala y todo el equipo de la campaña revisaban las encuestas y corroboraban la debacle. Enrique Peña Nieto va arriba ocho puntos, soltaban sin dar más detalles, aunque a esas alturas ya se habían despedido del segundo lugar.
En la derrota el silencio fue la primera respuesta de los panistas.
Con gestos de abatimiento Cecilia Romero, Luis Felipe Bravo Mena y Juan Molinar Horcasitas –quien reapareció aunque Vázquez Mota se había deslindado de él– caminaron rápidamente por el lobby del edificio de su partido y se escurrieron de la prensa.
Lo único que los panistas presumían públicamente –en redes sociales porque, ni se asomaban a los pasillos– era que estaban viendo la final de la Eurocopa.
Ya perdido el estado de Morelos, el gobernador Marco Adame hizo un último llamado a votar, pero no dejó de celebrar los resultados del futbol: ¡Qué partido dio España ante Italia, Campeón!
. Para rematar, el calderonista Javier Lozano, quien quedó en tercer lugar en busca de ser senador de Puebla, también festejó el gran e histórico triunfo de España 4-0 sobre Italia en la final de la Eurocopa. Felicidades a ambas escuadras y a sus aficionados
.
Aún con el teléfono en la mano y charlando con el Presidente, Vázquez Mota entró al estacionamiento a bordo de una camioneta y junto con sus colaboradores revisó las líneas del discurso en el que reconoció que los números no le favorecían.
Vestida con saco azul turquesa y falda negra salió al auditorio Manuel Gómez Morín rodeada de los integrantes de su equipo y del dirigente del PAN, Gustavo Madero. Los hombres más cercanos del presidente, como Ernesto Cordero y Rafael Giménez, el encuestador de confianza de Los Pinos, no ocultaban la tristeza, incluso Cortázar, prefirió quedarse atrás de Zavala para no hacer visible su congoja.
Hay que darle ánimo a la gente
, resumía un calderonista sobre la decisión de mostrarse fuertes y hasta festivos, porque se escuchaban muchas porras de ¡Josefina, Josefina tu historia no termina!
y ella no dejaba de sonreír ni de saludar con la palma de la mano.
La ex titular de Educación Pública adelantó su mensaje dos horas. Originalmente iba a hablar a las 22:30 horas, pero los números eran tan contundentes que no tenía sentido esperar a los conteos rápidos del Instituto Federal Electoral (IFE). Es una lección para el mismo PRI y para el PRD. Cuando sabe uno que perdió, perdió y punto
, comentaban entre sí los más próximos a la candidata.
Sus primeras lecturas sobre esta caída, que implicó retener sólo Guanajuato, perder bastiones históricos como Jalisco y sus tres delegaciones capitalinas, indicaban que el voto del miedo que generaba Andrés Manuel López Obrador nunca se vino con nosotros
. Se acabó acumulando con Peña”, aunque otros hablaban de que el voto útil panista terminó del lado del mexiquense.
Por eso, desde ahora comenzaron los ajustes de cuentas. Lo que hizo Fox no tiene madre
, expresó un ex integrante del gabinete de Calderón y añadió que Madero está en una posición incómoda para mantenerse al frente del partido, porque si bien el equipo de Vázquez Mota es responsable de este desastre, el líder del partido es de todo
, porque el pesar de los panistas obedece además a que Peña Nieto gobernará con menos contrapesos que ellos calculan que por lo menos tendrá mayoría en el Senado aunque quizá se dé mayor equilibrio en la de Diputados.