Chetumal, Q. Roo, 16 de junio. A 15 días de la elección presidencial, el candidato de la coalición PRI-PVEM a Los Pinos, Enrique Peña Nieto, pidió a la población hacer equipo con su proyecto, que es el de quienes creen que México debe cambiar, para mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, aseguró.

El abanderado del tricolor encabezó el mediodía de ayer un mitin en el estadio de futbol 10 de Abril, donde miles de personas colmaron el lugar, pese al intenso calor que superó los 30 grados centigrados.

La llegada del ex gobernador del estado de México fue precedida por el sobrevuelo de dos avionetas que llevaba en las alas el nombre del candidato.

Contra lo que ha sucedido en otras entidades, aquí no hubo en las entradas del estadio manifestantes antipeñistas.

En su discurso de 25 minutos, Peña Nieto se mostró confiado en ganar el próximo 1º de julio.

De hecho, aseguró que se encuentra a 15 días de ganar la Presidencia y lograr lo que todo México quiere: darle un cambio al país para salir de la parálisis en la que se encuentra y alejarlo de la condición de empobrecimiento y falta de crecimiento.

Pese a ello, reiteró su llamado a cerrar filas, no confiarse y seguir promoviendo el voto a su favor, pues no hay triunfos anticipados.

Peña Nieto dio por cierta la ventaja que algunas encuestas le otorgan en las preferencias electorales e insistió en que su triunfo no será sólo la victoria de un partido o una coalición de partidos.

Queremos que se convierta en el triunfo de todos los mexicanos, porque vamos a hacer cambios en la ruta del país, añadió.

El abanderado priísta reiteró las promesas que ha realizado a lo largo de su campaña y se comprometio a no fallar y cumplir sus ofrecimientos.

El mexiquense estuvo acompañado por Jorge Emilio Gonzâlez, el Niño verde, quien pese a dirigir el partido verde,  que está coaligado al PRI en este proceso electoral, ni siquiera fue mencionado por la conductora del acto o el propio aspirante a Los Pinos.

En cambio, el candidato tricolor tuvo la atención de mencionar al gobernador Roberto Borge, y al ex primer mandatario del estado, Jesús Martínez Ross, presentes en el acto.

Resaltó la ausencia del alcalde Carlos Mario Villanueva, hijo del ex gobernador Mario Villanueva preso en Estados Unidos por vinculos con el narcotráfico.

Centrado en mantener sus preferencias electorales y no entrar en polémica con sus adversarios, el candidato del tricolor dedicó la mayor parte de su discurso a sus compromisos de campaña.

En específico para los quintanarroenses, ofreció reducir las tarifas eléctricas, modernizar el aeropuerto de la ciudad, construir 300 kilómetros de caminos rurales y de zafra-cosecha y edificar un hospital de especialidades con área de oncologia, así como un nuevo campus de la universidad estatal.