Washington, 8 de junio. La secretaria de Estado estadunidense, Hillary Clinton, se entrevistó hoy con el enviado especial para Siria de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, para buscar la forma de que Damasco ofrezca una mayor respuesta al plan de paz vigente desde el 12 de abril.

La cita entre Annan y Clinton se desarrolló mientras que diplomáticos occidentales dieron a conocer en Nueva York la intención de tres de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, de impulsar un proyecto de resolución que incluya sanciones contra el gobierno del presidente Bashar Assad.

La resolución estaría atada al capítulo VII de la Carta de la ONU que prevé sanciones militares y no militares para restaurar la seguridad y la paz internacionales, afirmaron las fuentes consultadas por Afp, cuyos nombres, nacionalidades y cargos no fueron detallados.

La reunión de Annan y Clinton estuvo precedida por una breve conferencia de prensa en la que Annan reconoció que hay dudas sobre la efectividad del plan de seis puntos que puso en marcha este año, con el fin de impedir una guerra civil en Siria.

Algunos dicen que el plan está muerto. ¿Pero el problema es el documento o la instrumentación? Si es la puesta en práctica, ¿cómo volver al camino correcto? Y si es el plan, ¿que otras opciones tenemos?, preguntó el también emisario de la Liga Árabe.

Los cuestionamientos al plan de Annan se han producido a causa de las continuas violaciones al alto el fuego que forma parte de la inicitiva de pacificación para Siria, particularmente de la matanza ocurrida a finales del mes pasado en Hula, en el centro del país.

Annan confirmó que existen pláticas en medios diplomáticos para trabajar con otros gobiernos en la región y en el mundo en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto sirio, en el cual se han involucrado hasta ahora países árabes del golfo Pérsico.

El enviado de la ONU no precisó qué gobiernos se agregarían a las gestiones, aunque la cancillería de Francia informó este viernes que un nuevo grupo de contacto incluiría a Turquía, Arabia Saudita, Rusia y China, pero de ninguna manera a Irán.

El nuevo grupo de contacto es promovido por Annan y cuenta con el respaldo del gobierno francés del socialista Francois Hollande. Según la cancillería francesa, esta agrupación de naciones no sería incompatible con la organización informal denominada Amigos del Pueblo Sirio, encabezado por Estados Unidos, que fue conformada a finales de 2011 en Turquía.

Desde Ginebra, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) advirtió que la situación en zonas rurales de Siria es extremadamente tensa y ha provocado desplazamientos de población civil.

El portavoz de la organización, Hicham Hassan, dijo que las áreas que rodean las localidades de Idlib, Hama, Deraa, Deir Ezzor, Alepo, el puerto de Latakia y Damasco han sido escenario de combates.

Un millón y medio de personas necesitan ser atendidas por los efectos de las protestas iniciadas en marzo de 2011 y recrudecidas en agosto pasado, según el CICR, cuyos equipos visitan con frecuencia los sitios conflictivos.

La advertencia coincide con un llamado de atención hecho el jueves por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien afirmó que una guerra civil es inminente y real en Siria y que grupos terroristas están explotando el caos, lo que reduce la posibilidad de que el plan de paz de Annan pueda ser realmente aplicado.

En Damasco, mientras tanto, varias calles se convirtieron en escenario de intensos enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y grupos rebeldes, una situación que apenas a principios de año era imposible ver en la capital, debido al control de las fuerzas policiales.