l pasado lunes 28 de mayo nos enteramos por este medio que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) emitió convocatorias para la realización de congresos para renovación de comités ejecutivos en las secciones 22 de Oaxaca, 14 de Guerrero, 13 y 45 de Guanajuato, 29 de Tabasco y 44 de Durango; sin embargo, la nueve del Distrito Federal nuevamente quedó marginada de esos actos. Ello quiere decir que, bajo la lógica de la toma de nota
, a los 58 mil maestros de prescolar, primaria y niveles especiales se nos niega el derecho de elegir libre y democráticamente a nuestros representantes sindicales.
Cabe recordar que el último congreso seccional se realizó en 1998, en el cual fue electa Blanca Luna Becerril, quien debió terminar en 2001 pero que, después de su traición al Movimiento Democrático, fue sostenida por Elba Esther Gordillo Morales hasta 2008. La condición irregular de nuestra sección lleva ya 11 años.
En mayo de 2008 el CEN del SNTE emitió la convocatoria para llevar a cabo el 23 congreso para renovar el comité seccional. En las asambleas delegacionales realizadas el 30 de junio (todas, mañosamente programadas un día antes del evento) los maestros democráticos ganamos más de 500 delegados de los 666 que estuvieron en disputa. El primero de julio debió realizarse dicho congreso; empero, Gordillo Morales y su camarilla aplicaron un charrazo, cambiando la sede oficial
que dieron a conocer a los delegados. Con menos de 100 delegados dijeron haber electo un comité, a todas luces espurio.
El supuesto congreso, en la clandestinidad, estaba programado para dos días y duró menos de una hora. Los cargos de representación fueron rifados y se ungió a María Teresa Pérez Ramírez como secretaria general en ausencia, en medio de protestas del charrismo tradicional, que coreaba un nombre de los suyos.
El Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje (TFCA), dependiente de la Secretaría de Gobernación, validó ese fraude otorgándole la toma de nota
el 9 de septiembre de 2008.
Como Movimiento Democrático emprendimos una lucha política y legal. En el primer aspecto, los delegados democráticos elegimos a nuestro actual comité democrático y recuperamos nuestro edificio, que había sido saqueado y ocupado por golpeadores la madrugada de aquel primero de julio. En el segundo aspecto interpusimos dos amparos, que fueron desechados por los juzgados sexto y segundo en materia laboral, lo que nos obligó a recurrir al recurso de revisión el 27 de enero de 2009.
En un hecho histórico e inédito, el 17 de junio de ese año el tercer tribunal colegiado en materia laboral nos otorgó el amparo contra la resolución del TFCA. Como consecuencia, esta instancia quitó la toma de nota al comité elbista el 6 de agosto de 2009.
El grupo afín a Gordillo Morales interpuso un amparo y recurso de revisión que le fue negado. Por ende, se les eliminó de manera definitiva la representación estatutaria el 6 de agosto de 2010.
Estamos cerca de cumplir tres años de la primera resolución, con la que se debió quitar prerrogativas al comité charro y convocar a congreso para la elección de la representación sindical. No obstante, hoy las cosas transcurren como si no hubiera pasado nada. Ese comité de pacotilla sigue recibiendo todo tipo de concesiones de la SEP, entre ellas cientos de comisionados liberados de tiempo, que actualmente hacen labor proselitista en favor del Partido Nueva Alianza (Panal), y reciben por la cúpula sindical decenas de miles de pesos mensuales de nuestras cuotas sindicales.
Esta situación confirma que cuando hay pactos e intereses políticos o económicos la aplicación de la ley se supedita a los poderes fácticos. ¿Quién puede creer en los discursos de los funcionarios gubernamentales cuando se habla del respeto a la ley? También corrobora cómo el gobierno calderonista ha permitido a Gordillo Morales actuar con impunidad. Las protestas actuales de la CNTE tienen mucho que ver con el cacicazgo elbista. Por desgracia, el gobierno federal ni nos ve ni nos oye.
Los maestros de la sección nueve pedimos, exigimos, congreso ya para elegir sin trampas ni condiciones a nuestros representantes sindicales.
* Profesor, secretario general del Comité Ejecutivo Seccional Democrático IX del SNTE, que agrupa maestros de primaria y prescolar del DF.