El Banco de México (BdeM) intervino en el mercado para detener la depreciación del peso frente al dólar, una vez que el tipo de cambio alcanzó una paridad de 14.0789 pesos por dólar en las grandes operaciones interbancarias, lo cual implicó un deslizamiento de 2.6 por ciento de la moneda nacional. La divisa estadunidense se vendió entre 14.10 y 14.20 pesos en todos los bancos del sistema.

Una vez que esto ocurrió, automáticamente el banco central puso en subasta 400 millones de dólares de la reserva internacional de divisas del país, para evitar que el mercado de cambios se viera más presionado por falta de liquidez.

Pero sólo asignó 258 millones de dólares hasta la segunda subasta del día, a un precio de 14.0014 pesos por dólar en promedio, ponderado entre las 39 posturas presentadas por los intermediarios financieros, que demandaban un total de 761 millones de dólares. La tercera subasta fue declarada desierta. El mercado contó así con liquidez para satisfacer la demanda de divisas, pero ésta no disminuyó en el resto de la jornada.

Al cierre de la sesión en el mercado de monedas extranjeras, el precio del dólar quedó en 14.0350 pesos para las grandes operaciones interbancarias, el más elevado desde el 25 de noviembre de 2011. Esto significó para la moneda mexicana una depreciación de 2.28 por ciento en una sola jornada, con la cual acumuló una devaluación de 8.27 por ciento del 2 de mayo a la fecha.

El dólar Fix, utilizado para el pago de obligaciones en moneda extranjera, siguió la misma tendencia que el interbancario. Ayer este tipo de cambio cerró las operaciones en 14.9326 pesos, un precio 110.24 centavos mayor al que tuvo al inicio de este mes, y el cual implica una depreciación acumulada de 8.52 por ciento a partir del 2 de mayo, cuando se hizo más clara la presencia de un nuevo periodo de volatilidad.

Ocasionada por los movimientos de capitales de las naciones emergentes hacia los centros financieros de Estados Unidos, Alemania y Londres, esta etapa de volatilidad cambiaria ha sido relacionada con la situación política de Grecia y la posibilidad de su retiro de la Unión Europea, así como con la profundización de la crisis económica y bancaria de España.

Gabriel Siller, director de análisis económico-financiero de Banco Base, explicó: el peso presentó una alta volatilidad durante la sesión debido a la situación en Europa. Por un lado –dijo–, la canciller de Alemania (Angela Merkel) comentó que no se tomarían medidas en la reunión de Bruselas. No obstante, al final del encuentro hubo rumores sobre la aplicación de un posible seguro en los depósitos dentro del sistema bancario de la eurozona.

Cotización del dólar en una sucursal bancaria del Centro Histórico de la ciudad de MéxicoFoto Francisco Olvera

Esos mismos factores fueron mencionados por los analistas de Banorte-Ixe, quienes señalaron que el sesgo negativo ocurrió debido a los temores desatados por la permanencia o no de Grecia en la zona euro. A ello añadieron la incertidumbre provocada por los datos que indican un menor crecimiento de las exportaciones japonesas.

Analistas del grupo financiero Monex también atribuyeron el incremento de la volatilidad a la incertidumbre sobre la probable salida de Grecia de la eurozona y a que la búsqueda de seguridad en el mercado de deuda provocó la depreciación del peso frente al dólar.

La BMV otra vez a la baja

La situación europea provocó que la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) volviera al terreno negativo. El mercado de valores de México fue arrastrado por la crisis financiera europea y en la jornada de ayer perdió 58.81 unidades, equivalentes a 0.16 por ciento, con lo que el Índice de Precios y Cotizaciones cerró las operaciones en 37 mil 422.38 puntos. Fue una jornada donde predominó la oferta sobre la demanda de títulos.

No obstante la volatilidad, el país se ha mantenido como uno de los principales refugios de los capitales que se fugan del viejo continente, con la captación de casi 32 mil 600 millones de dólares de inversionistas extranjeros en lo que va del año, los cuales fueron invertidos en los mercados de renta fija (bonos gubernamentales) y variable (acciones cotizadas en bolsa).

Hasta el pasado 14 de mayo, los valores emitidos por el gobierno federal que se encontraban en manos de inversionistas extranjeros se elevaron a un billón 191 mil 584.62 millones de pesos, lo que representó una adición de 218 mil 338 millones de pesos en este año, equivalente a aproximadamente 16 mil 974.5 millones de dólares.

Hacia la compra de acciones de empresas cotizadas en bolsa, el saldo de inversión extranjera alcanzó 144 mil 879.6 millones de dólares, un incremento de 15 mil 622 millones en los primeros cuatro meses del año.