El candidato presidencial del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, aseguró: “vamos bien, el PRI va cayendo, así de sencillo. Vamos a volver a ganar (como en 2006), aunque todavía algunas encuestas ubiquen al tricolor con 97 por ciento de la intención del voto. Vamos a ganar, esa es mi percepción”.

En su conferencia matutina resaltó que hay un despertar ciudadano en todo el país; la levadura del movimiento son los jóvenes, son la vanguardia, son el motor del cambio, pero es general, es toda la población. Esa es la realidad.

Más tarde, el candidato presidencial de las izquierdas asistió a la Cumbre Ciudadana, cuyos trabajos se efectuaron en el Palacio de Minería y donde las organizaciones civiles le entregaron sus propuestas, con el objetivo de que, en caso de que gane la elección presidencial, sean consideradas en el Plan Nacional de Desarrollo.

Posteriormente López Obrador viajó del Distrito Federal a Reynosa, Tamaulipas, en el vuelo 2596 de Aeroméxico. Media hora después de haber despegado el avión, un grupo de pasajeros le organizó porras y aplausos. Fue un mitin al candidato, a 36 mil pies de altura, en el que durante 10 minutos los viajeros lo alentaron a seguir su campaña y ganar las elecciones del próximo primero de julio.

Durante su conferencia matutina, el candidato presidencial dijo: estoy insistiendo mucho en la defensa del voto, en que tengamos a los representantes en las casillas. Ya estamos bastante avanzados en la construcción de la estructura para la defensa de los sufragios. Hay estados donde ya se terminó de construir esa estructura con Morena (Movimiento Regeneración Nacional), pero queremos tener pronto el ciento por ciento; estoy convocando a todos los ciudadanos a que nos ayuden a cuidar las casillas y a defender el voto.

Se le preguntó sobre los noticiarios de Televisa, que el lunes por la mañana hicieron un recuento sobre el papel del candidato presidencial priísta, Enrique Peña, en la Universidad Iberoamericana, y que especialistas consideraron una especie de control de daños para recuperar credibilidad.

López Obrador manifestó: creo que es de sabios cambiar de parecer; yo no puedo pensar que no cambien los medios, en este caso Televisa, viendo la situación real del país. Ellos sin duda tienen un proyecto, es evidente el apoyo a Peña Nieto, pero a lo mejor están rectificando y se han dando cuenta de que eso no es conveniente, sobre todo para la nación, y con esta actitud de informar sobre el caso de los jóvenes, con objetividad, es una buena señal.

Celebró que ese cambio esté ocurriendo: no puedo decir que es una estrategia o una maniobra, no, porque es conveniente para México la apertura de los medios, que se tenga información. Si ellos están en plan de rectificar y de informar con objetividad, cosa que no habían hecho, porque es evidente y notorio el manejo tendencioso de todo lo que tuvo que ver con jóvenes, bienvenidos.

Sobre el decálogo de Peña Nieto , manifestó: si quiere meter a Montiel de contralor, para qué hablamos de eso. ¿Ustedes le creen a Peña Nieto? Yo tampoco.

En el Palacio de Minería, el candidato presidencial de las izquierdas asistió para que organizaciones de la sociedad civil le entregaran las propuestas de la Cumbre Ciudadana. Fue recibido por la presidenta de Causa Común, María Elena Morera, y el presidente de Somos Más, Marcos Fastlicht.

El candidato dijo a los dirigentes de las organizaciones ahí representadas: recibo las propuestas de ustedes, desde luego que las comparto, asumo y acepto responder la petición que nos hacen, para tener una comunicación permanente.

Durante su participación en la cumbre dijo a los representantes de organizaciones civiles que le parecía bueno que en este foro se analice a fondo el problema de la violencia en el país. Sabemos lo que se tiene que hacer para serenar al país, pero desde luego que se requiere la participación de la sociedad civil, concluyó.