Si las autoridades locales y federales no diseñan pronto un esquema para dejar de sobrexplotar los mantos acuíferos subterráneos y mejorar la red de distribución, se corre el riesgo de sufrir un colapso a mediano plazo, advirtió el titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Luis Luege Tamargo.

Entrevistado al término de su participación en la segunda reunión ordinaria de la Comisión de Cuenca para el Rescate de Ríos, Barrancas, y Cuerpos de Agua en el Valle de México, el funcionario advirtió que las consecuencias de dejar sin el vital líquido a los más de 20 millones de personas que viven y/o trabajan en el Distrito Federal y su área conurbada serían inimaginables.

Luego de escuchar el comentario de un asistente a la reunión, quien le advirtió sobre la posibilidad de un tercer colapso en el abastecimiento de agua –en referencia a los ocurridos en 1954 y 1976–, Luege indicó que en este momento no ve un panorama similar, pero estuvo de acuerdo en que si no se hace algo para administrar mejor el líquido, se acerca la posibilidad de enfrentar una nueva crisis.

No tenemos ni idea de lo que representa una falta de agua en el valle de México, donde hay 20 millones de habitantes. [...] No es un escenario catastrofista, es real, y hay que luchar para que no se dé, puntualizó en entrevista con los medios.

Minutos antes, durante la inauguración del foro, ya había mencionado que en materia de agua el valle de México está en una situación de desastre ambiental, debido, entre otros factores, a la sobrexplotación de los mantos acuíferos subterráneos, y el crecimiento desordenado y anárquico de las grandes ciudades de la zona, especialmente el Distrito Federal y Toluca.

Por lo anterior, el funcionario llamó a rescatar los ríos, barrancas y cuencas donde se recargan los mantos freáticos para renovar naturalmente el ciclo hídrico; redoblar esfuerzos en el tratamiento de aguas residuales; recuperar la zona de las lagunas de Xico y encontrar nuevas fuentes de abastecimiento, entre las que podrían estar Tula, Necaxa, Tecolutla y Temascaltepec.

Luege subrayó que la tarea de recuperar las fuentes de agua en el país debe ciudadanizarse —como demuestra el hecho de que haya 30 asociaciones civiles vinculadas al trabajo de limpieza de ríos y cuencas–, y estimó que en el valle de México hay 100 barrancas susceptibles de rescate para su aprovechamiento.