El candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador y Bernardo Bátiz, propuesto para encabezar la Procuraduría General de la República (PGR), sostuvieron que no usarán las instancias de justicia como herramienta de persecución política y que pasarán de la guerra a la paz sin impunidad ni corrupción.

Durante la presentación de los primeros resultados de los foros que llevaron a cabo integrantes de lo que sería el gabinete de seguridad, Marcelo Ebrard, jefe de Gobierno capitalino, dijo que se requiere un cambio de estrategia política diferente a lo que hoy ofrece el PRI: el pacto y el cinismo con organizaciones criminales, porque eso nos va a llevar al precipicio o cuando menos nos va a dejar donde estamos.

Afirmó que el tema central es cómo pacificar a un país ensangrentado y con violencia en la que pareciera que se proponen sólo dos caminos: seguir con lo mismo que hemos conocido o irnos a una especie de pacto cínico como el que integran la mayor parte de los estados que gobierna el PRI, que es por cierto donde tenemos más violencia.

El jefe de Gobierno acepta ser eventual titular de Gobernación

Al inicio de su discurso, en la Antigua Escuela de Medicina, López Obrador resaltó que el jefe de Gobierno será secretario de Gobernación si gana la Presidencia, y éste extendió los brazos en señal de agradecimiento. En una crítica a la política anticrimen del gobierno de Felipe Calderón, expresó: No voy a imponer nada ni a dar consigna para que se afecte al adversario o se tuerza la ley. Voy a escuchar sus recomendaciones.

Bátiz prometió serenar al país, cesar la guerra y pasar del conflicto armado a un Estado con justicia. La PGR en ninguna de sus funciones actuará por motivos políticos, ideológicos o partidistas, ni perseguirá intereses distintos a la verdad. Ofreció que no habrá violaciones a los derechos humanos y criticó las prácticas actuales –como se conduce Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública– de presentación de detenidos ante medios de comunicación, porque equivale a la pena de infamia expresamente prohibida en el artículo 22 constitucional.

No vamos a teatralizar ni sembrar pruebas falsas, armas, drogas. Habrá cuidado en que la procuraduría vuelva a ser una institución de buena fe.