Domingo 29 de abril de 2012, p. 16
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 28 de abril. En México, la deforestación representa cerca de 17.3 por ciento de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI), pero al mismo tiempo, los bosques son identificados como la mejor opción de mitigación del cambio climático a corto plazo por el bajo costo frente a otras opciones.
Esto se debe a que la superficie forestal del planeta tiene una enorme capacidad de fijación y captura de carbono, así como un papel importante en el desarrollo económico de muchas regiones rurales, de ahí la necesidad de asegurar que nuestros bosques y selvas conserven la mayor cantidad de masa forestal y así asegurar los servicios ambientales que proveen naturalmente.
La selva Lacandona en Chiapas es un ecosistema que brinda de manera directa a la entidad gran parte de estos servicios aun en estado de conservación, representando sólo 0.9 por ciento del territorio nacional.
A fin de rescatar y conservar las 614 mil hectáreas de selva que aún quedan en el estado, acciones tempranas como el pago por servicios ambientales mediante el Programa de Emisiones por Deforestación y Degradación Evitada (Redd plus) garantizan nuestra supervivencia con la preservación de los recursos naturales.
Dado que la mayor parte de la deforestación y degradación de los bosques sucede en los países en desarrollo, la creación de un esquema Redd como un sistema internacional de compensación dirigido a los dueños de las áreas forestales constituye una importante iniciativa para promover un manejo forestal sustentable a escala global que logre conservar la cubierta forestal para reducir emisiones de bióxido de carbono (CO2).