Lo importante es detectar si tienen la misma eficacia que los originales: Luis Meillón
En Cancún se realiza el Congreso de la Agrupación Mexicana para el Estudio de la Hematología
Jueves 26 de abril de 2012, p. 3
Cancún QR, 26 de abril. Donde quiera que estén los linfocitos, células que defienden al organismo de virus y bacterias, puede haber cáncer linfático, como el no Hodgkin, el sexto más frecuen- te entre los tumores malignos, para el cual desde hace 14 años existen tratamientos eficaces con medicamentos biotecnológicos, incluso para lograr su cura, aseguró Luis Meillón, jefe del Servicio de Hematología del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
En el contexto del Congreso de la Agrupación Mexicana para el Estudio de la Hematología, el especialista advirtió que los médicos están atentos a los cambios que se empiezan a dar en las instituciones públicas por la llegada de fórmulas genéricas de biotecnológicos, identificados en México como biocomparables.
Dijo que lo más importante es detectar con prontitud si las fórmulas que se presentan tienen la misma eficacia que la original y realmente logran la disminución y/o erradicación del tumor, y que no existan efectos adversos.
Detalló que en el caso de los biotecnológicos, que se originan a partir de información genética de células vivas, es imposible garantizar que sus genéricos (biocomparables) tendrán la misma calidad y eficacia terapéutica. Es posible, pero no en todos los casos.
En México, la discusión sobre las reglas que deben cumplir los biotecnológicos y los biocomparables concluyó hace unos días, con la publicación en el Diario Oficial de la Federación de las modificaciones al Reglamento de Insumos para la Salud, que detallan los requisitos que deben cumplir esas moléculas para poder venderse en el país y con las cuales, de acuerdo con la autoridad sanitaria, se garantiza la protección de la salud de las personas.
Alta posibilidad de cura
La atención médica integral del linfoma no Hodgkin fue incluida el año pasado en la cobertura del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos del Seguro Popular, justamente por la alta probabilidad de cura que tienen los pacientes con los tratamientos disponibles.
Meillón explicó que, con un tratamiento de quimioterapia tradicional, hasta hace 15 años los pacientes lograban una supervivencia libre de enfermedad de 1.2 años, pero al agregar un producto biotecnológico innovador –también conocido como anticuerpo monoclonal–, cuyo mecanismo de acción va directo contra el tumor, ese periodo se extendió a casi un lustro.
Lo más importante es que mientras más tiempo transcurra sin que se presente una recaída es menos probable que el padecimiento resurja. De hecho, después de tres años ese riesgo es casi cero; por eso se habla de curación, aseguró el médico.
Los linfomas, junto con el mieloma (cáncer en la médula ósea), son los más frecuentes en la sangre. Se manifiestan como un crecimiento de los ganglios, los cuales son las estructuras encargadas de defender de invasores
el organismo; están en contacto con la sangre y se componen principalmente de linfocitos. Cuando éstos enferman, se reproducen sin control y sin causa que lo justifique.
Un factor que explica el elevado nivel de éxito de los tratamientos médicos para el control de los linfomas es que se presentan en zonas visibles del organismo, como el cuello, las axilas y la ingle. Son bolitas
que muy pronto se identifican como cáncer, a diferencia de lo que ocurre con otras neoplasias, como las de pulmón o páncreas, las cuales se detectan la mayoría de las veces en etapas avanzadas.
Una cuarta parte de los casos de linfomas se presentan en la piel, aparato digestivo, huesos, testículos, pulmón o sistema nervioso central.
El especialista resaltó la importancia de que tanto médicos como pacientes identifiquen los medicamentos que van a utilizar para enfrentar el linfoma, pues aunque a escala mundial existen lineamientos específicos para la combinación de fórmulas de quimioterapia con biotecnológicos, la introducción de biocomparables al mercado farmacéutico, en específico para el manejo del linfoma, los coloca en un nuevo escenario clínico.
En el caso del IMSS, comentó, las compras de este año incorporaron por primera vez los biocomparables para el tratamiento del tumor hemático, aunque el personal médico planteó a las autoridades la necesidad de comprar el producto original para aproximadamente 250 pacientes que iniciaron tratamiento con él. Y es que, explicó Meillon, las guías mundiales establecen que no se deben mezclar los medicamentos en un mismo individuo.
Hace un mes llegaron los biocomparables al IMSS, los cuales se emplearán en los nuevos enfermos, alrededor de 250 que llegan cada año sólo al CMN Siglo XXI.