Lunes 16 de abril de 2012, p. a14
Belfast, 15 de abril. Lanzan flores al agua helada en la que reposa el Titanic, inauguran un monumento en Irlanda (donde fue construido el buque) y realizan una ceremonia en Canadá, donde reposan las víctimas de la tragedia, para conmemorar el drama en ambos lados del Atlántico y en alta mar, a cien años de ocurrido.
Dos cruceros (uno procedente de Southampton, donde zarpó el buque el 10 de abril de 1912, y el otro de Nueva York, destino previsto) llegaron al lugar del naufragio la madrugada del domingo.
A bordo del Balmoral, unos mil 300 pasajeros, entre ellos algunos descendientes de las víctimas, guardaron un minuto de silencio.
En el Journey, llegado de Nueva York, con 440 pasajeros, se recreó la catástrofe en el lugar donde el casco del Titanic yace a 3 mil 800 metros de profundidad. Un siglo después, a la misma hora de entonces, los altavoces repitieron el mensaje de alerta del comandante del Titanic en el que anunció que el barco, considerado insumergible, había chocado con un iceberg.
En Belfast se develó un monumento en el que figuran, por primera vez, los nombres de todos los pasajeros y miembros de la tripulación, incluidos los músicos.