Damasco, 11 de abril. Las tropas sirias atacaron este miércoles barrios opositores en la ciudad de Homs con morteros pesados, horas después de que el gobierno del presidente Bashar Assad aseguró a la Organización de Naciones Unidas (ONU) que respetará un cese del fuego con los opositores, que debería comenzar la mañana del jueves, día en que expira el ultimátum del plan del emisario Kofi Annan.

El gobierno sirio advirtió que se reserva el derecho de reaccionar adecuadamente a cualquier ataque terrorista, como denomina a la acción de la oposición armada.

Annan, enviado de la ONU y de la Liga Árabe a Siria, recibió una carta del ministro sirio de Relaciones Exteriores, Walid Muallem, en la que el gobierno promete que cumplirá el ultimátum fijado para salir de 13 meses de conflicto que, según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Gran Bretaña, ha dejado ya más de 10 mil muertos.

En la misiva, Damasco anuncia el cese de todos los combates militares en todo el territorio sirio a partir de las seis de la mañana, hora local, del jueves 12 de abril de 2012, lo que corresponde al ultimátum fijado por Annan, indicó Ahmad Fawzi, vocero del enviado.

El anuncio también fue hecho por el Ministerio sirio de Defensa y divulgado por la televisión local. Después de que nuestras fuerzas armadas cumplieran su misión de combatir las acciones criminales de los grupos terroristas y afirmar la autoridad del Estado en el territorio (sirio), deciden poner fin a esta misión a partir del jueves por la mañana, recalcó.

De acuerdo con el plan de paz de Annan, la fecha estipulada para el retiro de las tropas sirias y de armamento pesado de las ciudades opositoras era el martes 10 de abril, pero en un discurso ante la Asamblea General de la ONU el jueves anterior, el enviado de la ONU y la Liga Árabe a Siria señaló que si el gobierno cumplía con lo estipulado, entonces él podrá llamar a un cese completo de las hostilidades para las 6:00 horas locales del 12 de abril.

En Irán, donde se encuentra de visita, Annan estimó que si el gobierno y la oposición respetan lo estipulado en su plan de paz, a partir de las 6:00 horas del jueves debemos ver una clara mejora de la situación en el terreno.

Añadió que el gobierno de Assad dio clarificaciones suplementarias sobre lo que espera de la oposición: garantías sobre el hecho de que las fuerzas rebeldes cesarán también los combates para permitir el fin de toda violencia.

Durante la visita del emisario a Teherán, el Ejecutivo sirio recibió un fuerte apoyo de Irán, que reiteró su posición de que Assad debe seguir en el poder y que cualquier cambio debe ocurrir sólo mediante el diálogo entre el pueblo y el actual gobierno, indicó el ministro de Relaciones Exteriores, Ali Akbar Salehi.

Tras una reunión con Annan, Salehi dijo que su gobierno se declara hostil a las intervenciones extranjeras en los asuntos de cualquier país, y puntualizó que todo cambio deberá hacerse bajo el gobierno sirio actual.

Pero para la embajadora estadunidense en la ONU, Susan Rice, las promesas de Damasco tienen poca credibilidad dado el pasado historial del gobierno sirio. Estimó, asimismo, que aunque las tropas sirias cesen efectivamente la violencia, esto no puede ser considerado como una aplicación del plan de seis puntos de Annan y recordó que Damasco se comprometió a retirar sus tropas de las ciudades sirias el 10 de abril y no lo respetó.

Paralelamente, la secretaria de estadunidense de Estado, Hillary Clinton, se declaró alarmada por la actual violencia en Siria, al hablar ante los cancilleres del Grupo de los Ocho países más industrializados del mundo (G-8) que se reúnen este miércoles el jueves en Washington, y en cuya agenda figura la crisis siria.

Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Guido Westerwelle, instó a Moscú a distanciarse de Damasco y expresó su deseo de que los ministros del G8 lancen un mensaje de unidad y determinación contra el régimen de Assad.

Precisamente, Rusia, aliada del régimen de Assad, tomó nota de la promesa de Damasco y destacó que ahora le toca a la oposición armada cumplir el cese del fuego.

Antes del anuncio del gobierno sirio, China se declaró profundamente inquieta por la continuación de la violencia en Siria y llamó a Assad aplicar el plan de paz Annan.

No obstante, el Consejo Nacional Sirio (CNS), una coalición de la oposición, aseguró en un comunicado que no hay ninguna señal sobre el terreno de que el régimen vaya a respetar las condiciones de Annan.

Por el contrario, la oposición denunció nuevas operaciones militares contra los focos de protesta, en decir, en Derá, Deir Ezzor, Aleppo, Damasco, y atacaron con morteros las ciudades de Homs y Hama, con saldo de al menos 14 civiles muertos.

De acuerdo con The Independent, a pesar de la promesa del gobierno, la devastación en Homs y en otras localidades parece que va a continuar, ya que las tropas de Assad muestran que no van a bajar la guardia en la campaña despiadada de bombardear los bastiones rebeldes.

El diario británico dijo que fotografías muestran edificios reducidos a escombros, casas quemadas y coches convertidos en pedazos de metal retorcido por la ferocidad del fuego en una ofensiva contra rebeldes a partir de principios de febrero.

Medios turcos, de su lado, informaron de nuevos disparos desde Siria hacia el campamento de Kilis, en la frontera común, por segunda vez en tres días.

El gobierno turco, que el lunes amenazó con nuevas medidas contra Siria, exigió hoy una resolución de la ONU para proteger a la población civil. El primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo que su país podría invocar el artículo 5 de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para proteger su frontera.

El presidente de Estados Unidos, Barak Obama,y la canciller de Alemania, Angela Merkel, se declararon de acuerdo en la necesidad de una acción más decidida del Consejo de Seguridad ne la ONU sobre Siria, en una conversación telefónica.

El presidente y la canciller comparten la preocupación de que el gobierno de Asad no está cumpliendo con los términos del acuerdo negociado por Kofi Annan y mantiene una brutalidad inaceptable contra su propio pueblo, señaló un comunicado de la Casa Blanca.

Francia externó su deseo de que la ONU envíe observadores a Siria para verificar qué tanto el ejército y los rebeldes respetan el alto el fuego.