El legado de Emiliano Zapata está depredado por las importaciones de alimentos, pobreza, abandono de las parcelas y migración de hombres y mujeres del campo, expusieron Rafael Galindo Jaime, dirigente de la Central Campesina Independiente, y Carlos Salazar Arriaga, presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México.

En el contexto del 93 aniversario luctuoso del Caudillo del Sur, apuntaron que las importaciones de maíz, alimento fundamental de la dieta de los mexicanos, aumentaron en 2 mil 500 por ciento desde la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) a la fecha.

Asentaron que con el actual modelo económico se ha limitado el desarrollo de los campesinos; necesitamos otra revolución, otro modelo de desarrollo que permita sumar las aspiraciones de todos los mexicanos de acceder a educación, trabajo, salud, equidad, bienestar y seguridad.

En alusión al proceso político electoral, Carlos Salazar Arriaga apuntó que si las vacas comieran periódicos, discursos y promesas ya hubieran reventado de gordas; hay candidatos que van a las zonas rurales sólo en busca de votos y después olvidan a los campesinos.

Galindo Jaime habló de la disminución de la población rural; hace dos décadas, en el campo estaba 28 por ciento del total de los mexicanos, actualmente es sólo 22 por ciento. Ante la falta de oportunidades de desarrollo cientos de mexicanos migraron a Estados Unidos, en donde están 11 de cada 100 que nacieron en el país.

La estrategia gubernamental ha llevado al colapso del agro; la desregulación de las importaciones ha resultado imprudente, especuladora y depredadora de la calidad de los alimentos y otros bienes; las elevadas importaciones de maíz sólo son un ejemplo de la problemática que enfrenta México por la falta de productividad y competitividad del sector primario, agregó Salazar Arriaga.

“Hay preocupación en el sector, ya que en lo que va de este siglo se han presentado dos crisis alimentarias –en 2008 y 2011– y además en lo político se ha limitado el acceso al sector campesino. Los partidos redujeron la cuota de representantes de dicho sector social, lo que refleja una pérdida de interés en la agenda rural y en el proyecto de nación que proponen”, sostuvo el dirigente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México.