La presidenta brasileña evidencia sus diferencias con EU durante una cena en Washington
Miércoles 11 de abril de 2012, p. 23
Río de Janeiro, 10 de abril. La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, defendió en Washington el fin del bloqueo de Estados Unidos a Cuba y rechazó la adopción de sanciones contra Irán por el programa nuclear de la república islámica, reveló hoy la agencia brasileña Estado.
Según el informe, la mandataria brasileña hizo evidentes las discrepancias con la política de Estados Unidos durante una cena ofrecida en la noche de este lunes por el embajador brasileño en Washington, Mauro Vieira, después de la reunión de Rousseff con su par estadunidense, Barack Obama.
Fue una cena muy agradable. La presidenta estaba muy abierta al intercambio de ideas y abordó un abanico muy amplio de asuntos tanto domésticos como de política exterior
, dijo a la agencia Estado el presidente del Consejo de Relaciones Exteriores, Richard Haass, uno de los asistentes a la cena.
Según el informe, durante la cena Rousseff volvió a defender el fin del bloqueo estadunidense a Cuba, tal como había hecho en el encuentro con Obama, cuando advirtió que la sexta Cumbre de las Américas, que se celebrará este fin de semana en la ciudad colombiana de Cartagena, deberá ser la última sin la participación de la isla, y subrayó que ésta es una posición de consenso
de los países latinoamericanos.
Además, la presidenta rechazó la imposición de sanciones a Irán y también la posibilidad de una intervención armada en Siria, ambas medidas defendidas por Washington, agregó la agencia.
Asistieron a la cena 24 invitados, incluidas las ex secretarias de Estado Madeleine Albright y Condoleezza Rice; el ex consejero nacional de Seguridad del gobierno de Jimmy Carter, Zbigniew Brzezinski; la directora ejecutiva para América Latina del Consejo de Relaciones Exteriores, Julia Sweig, así como varios empresarios y analistas políticos de la prensa estadunidense.
La visita de la mandataria brasileña a Estados Unidosconcluyó hoy en Boston, donde Rousseff sostuvo encuentros con dirigentes de la Universidad de Harvard y del Instituto Tecnológico de Massachusetts, en búsqueda de abrir camino a proyectos de intercambio y concesión de becas de especialización para investigadores y científicos del país sudamericano.
En Brasilia se informó que unas 75 mil becas gubernamentales y 24 mil aportadas por empresas privadas para que más de 100 mil brasileños estudien en las mejores universidades del mundo en los próximos cuatro años, son el eje del programa Ciencia sin Fronteras del gobierno de Rousseff.