Por unanimidad, los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ratificaron la decisión del Instituto Federal Electoral (IFE) de pedir al presidente Felipe Calderón suspenda el envío de cartas y correos electrónicos a los contribuyentes, por considerar que con ello resalta su actividad personal, lo que afecta el proceso político- electoral.

En una sesión de trabajo que duró sólo 30 minutos, los magistrados rechazaron el recurso de apelación interpuesto por Miguel Alessio Robles, consejero jurídico de la Presidencia de la República, para impugnar el acuerdo de la Comisión de Quejas y Denuncias del IFE (CQD025/2012), que declaró procedentes las medidas cautelares que solicitó el Partido Revolucionario Institucional (PRI) para que el Ejecutivo federal deje de enviar, por medio del Servicio de Administración Tributaria (SAT), cartas a los contribuyentes que cumplen.

En la misiva, Felipe Calderón expone: Gracias a tu contribución construimos nosotros más obras carreteras, hospitales, escuelas; fortalecemos nuestros programas sociales como Oportunidades, estancias infantiles, becas escolares. Te refrendo mi compromiso de continuar trabajando para que tú y tu familia puedan vivir mejor.

La carta, muy sencilla, no era de agradecimiento de la autoridad fiscal dirigida a los contribuyentes por haber cumplido con sus obligaciones, apuntó Manuel González Oropeza. Está bien agradecer a quien cumple, pero desde el membrete de la misiva se establece que es del escritorio del presidente Felipe Calderón, lo cual la hace una carta personal.

Al leer algunos de los párrafos de la misiva presidencial, González Oropeza comentó que con los impuestos se pagan más de los tres programas a los que aludió Calderón Hinojosa, quien con el último párrafo de su breve documento lo individualizó. Todo ello no es válido en el contexto del proceso electoral; (la carta) la podría haber hecho el Servicio de Administración Tributaria sin nombre y de manera reflexiva, sin necesidad de que alguien se atribuyera (las acciones).

Se presume injerencia

El magistrado presidente del tribunal electoral, Flavio Galván Rivera, refirió que de acuerdo con el dictamen del IFE, la carta “sí contenía elementos para presumir que podrían implicar condiciones de injerencia en el proceso electoral.

Confirmar la orden de suspensión no es porque el presidente Calderón promueva su imagen con recursos públicos, pues eso no sería competencia del IFE ni del TEPJF, sino de que su conducta puede tener trascendencia en materia electoral”.

Resaltó que se requiere de un compromiso con el estado de derecho para que el procedimiento electoral llegue a buen puerto y sea ejemplar para no estar resolviendo medidas cautelares, como la ordenada por el IFE. El principio de legalidad y cultura de la juridicidad debe prevalecer desde el más modesto empleado hasta el primer servidor público del país.

La también magistrada María del Carmen Alanís puntualizó que en la sesión, que se llevó a cabo en la sala superior del TEPJF, no se resolvía el fondo del asunto, sino únicamente las medidas cautelares establecidas por el Instituto Federal Electoral.