Martes 17 de enero de 2012, p. 3
Lo que viene para el tratamiento de las enfermedades siquiátricas es la estimulación eléctrica cerebral, también conocida como neuromodulación. El neurocirujano Luis García Muñoz explicó que las investigaciones continúan y dentro de los próximos cuatro a cinco años podrían tenerse resultados exitosos para el tratamiento de enfermedades como alcoholismo, adicciones, depresión, trastorno obsesivo convulsivo y las relacionadas con la alimentación: anorexia y bulimia.
Comentó que la técnica se empezó a utilizar en los años 60 para aliviar el dolor de médula y a partir de la década de los 90 su uso se extendió al mal de Parkinson y la epilepsia.
Consiste en la colocación de un sistema eléctrico con conexiones directas a las zonas afectadas del cerebro y mediante estímulos se logra la corrección del problema.
Tiene la ventaja de que es temporal, porque su funcionamiento depende de una batería y cuenta incluso con un sistema de encendido y apagado. La desventaja es su alto costo.
La suspensión de la actividad del equipo hace que la persona vuelva al estado anterior a su colocación, advirtió García Muñoz.
El especialista comentó que los nuevos avances de las investigaciones se presentarán el próximo mes durante el Congreso Internacional de Neuromodulación, a efectuarse en Alemania.