La Comisión Permanente del Congreso de la Unión acordó constituir un grupo plural de trabajo para dar seguimiento a las investigaciones por el asesinato de los estudiantes de la Normal Ayotzinapa de Guerrero, Gabriel Echeverría de Jesús y Jorge Alexis Herrera Pino.

Durante la sesión de ayer, la bancada de Acción Nacional, sin embargo, justificó la represión con el argumento, expresado por el senador Felipe González, de que no se puede dejar que (los estudiantes) cierren una autopista para que miles no lleguen a su trabajo, o que desgracien a un estado en su fortaleza, que es el turismo.

Al avalar el punto de acuerdo presentado por el Partido del Trabajo (PT), el coordinador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Armando Ríos Piter, consideró que la investigación debe ser imparcial, verídica y deslindar las responsabilidades de las autoridades del estado, pero también las del secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, quien no ha dado la cara.

Felipe González, quien en diciembre de 2005 asistió armado al festejo de su candidatura al Senado, advirtió que tampoco puede permitirse que el ejemplo de la manifestación de los estudiantes de Ayotzinapa se reproduzca en las otras escuelas normales del país.

No es la única normal y si este problema no se resuelve pronto, habrá problemas en todos los estados. Mañana (jueves) hay aquí, en el Distrito Federal, una manifestación más, afirmó.

El ex subsecretario de Gobernación en el sexenio de Vicente Fox afirmó que en la investigación del grupo de trabajo debe revisarse por qué la escuela está cerrada desde noviembre y por qué tienen que imponer los estudiantes a su director. ¿Hay autogobierno?

En contraste, los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde Ecologista de México (PVEM) exigieron justicia para las familias de los dos jóvenes brutalmente asesinados por tratar de ejercer sus derechos de petición y libre expresión, así como de insistir en sus demandas al gobernador Ángel Aguirre Rivero.

El diputado priísta César Augusto Santiago afirmó que el asesinato de los dos estudiantes es una muestra más de la barbarie, de la carnicería que vive México por la guerra del presidente Felipe Calderón contra las bandas criminales.

Desde la tribuna cuestionó que los gobiernos federal y de los estados privilegien la compra de armas de alto poder, que no sólo son utilizadas para combatir a la delincuencia organizada, sino también para reprimir a los movimientos sociales.

No vamos a resolver la inseguridad con el país militarizándose todos los días. Comprando armas pavorosas, granadas y cañones. Era mejor mil veces tolerar a los jóvenes, aceptar sus demandas, que la normal de Ayotzinapa evolucione. Eso es más barato y mucho mejor que un desfile de monos de negro (los policías) absolutamente incapaces, cuya torpe maniobra concluyó en la muerte de dos jóvenes inocentes, expresó.