La batalla seguía esta madrugada cerca de la frontera con Afganistán
Sábado 17 de diciembre de 2011, p. 19
Islamabad, sábado 17 de diciembre. Fuertes combates entre talibanes y las fuerzas paquistaníes se registraron entre la noche del viernes y la madrugada de este sábado cerca de la frontera con Afganistán, lo que arrojó un saldo de 22 muertos, 21 combatientes islámicos y un soldado del ejército gubernamental.
Los enfrentamientos se desataron en Orakzai, uno de los siete distritos tribales donde tienen sus campamentos los miembros de una facción insurgente de la organización Tehrik-e-Taliban Pakistan, al mando del comandante Hakimullah Meshud.
Una fuente militar informó que alrededor de 50 talibanes emboscaron ayer a un convoy militar que se desplazaba por la zona de Orakzai. Las tropas recibieron el apoyo de helicópteros, que lograron dispersar a los talibanes.
El ejército paquistaní pactó con Estados Unidos a principios de la década pasada fortalecer militarmente la zona fronteriza con Afganistán, lo que ha llevado ya a la muerte de 3 mil soldados.
Los refuerzos militares fueron enviados para evitar que los talibanes afganos utilicen el territorio de Pakistán como refugio, en un área donde tienen sus campamentos esos rebeldes paquistaníes.
Washington logró el apoyo de Islamabad a cambio de apoyo financiero, pero Estados Unidos se ha quejado en repetidas ocasiones de que las fuerzas armadas de Pakistán no hacen lo suficiente para erradicar a los islamitas armados.
El jueves pasado, el Senado estadunidense decidió en una votación congelar un fondo financiero de 700 millones de dólares para el ejército de Pakistán, en espera de que los militares del país asiático mejoren sus operaciones para neutralizar los ataques con bombas que estallan al ser activadas por el paso de vehículos, táctica que ha sido una de las principales causas de bajas de las tropas estadunidenses y sus aliados militares.
La zona tribal ha sido asediada por aviones no tripulados estadunidenses, bajo dirección de la CIA, desde 2004, aunque se supo públicamente de su uso hasta 2009.
En los tres últimos años, la región fronteriza ha sido el escenario de 236 ataques de los llamados drones, que han provocado la muerte de mil 767 personas, muchas de ellas presuntos rebeldes islámicos, según datos del ejército y el servicio de inteligencia paquistaní obtenidos por la agencia Afp.