El escritor de origen cubano Eliseo Alberto falleció la mañana del domingo en el Hospital General de la ciudad de México, por un paro cardiaco causado por complicaciones del trasplante renal que se le realizó hace unos días.

El cuerpo fue velado en una agencia funeraria ubicada en Coyoacán, de donde será llevado para su incineración hoy, a las 18 horas.

Trascendió que su hija, María José, desea que las cenizas reposen en Cuba junto con las de su abuelo, Eliseo Diego, uno de los grandes poetas cubanos. También corría la versión de que se le haría un homenaje en el Palacio de Bellas Artes.

Dueño de las mejores prosas de AL

Rafel Pérez Gay, escritor, lamentó el deceso. “Se ha muerto un gran escritor, desde hace muchos libros me parece que Eliseo Alberto era dueño de unas mejores prosas de América Latina. Su obra novelística tiene dos extremos, que son La eternidad comienza el lunes y Esther en alguna parte. En estos libros está presente la idea del exilio”.

En las proximidades de su fallecimiento, escribía una versión novelada de la ópera El día que la banda de música se fue a la guerra.

Nacido el 10 de septiembre de 1951 en Arroyo Naranjo, Cuba, el periodista, novelista, poeta y guionista de cine se recuperaba de la intervención, tras sufrir varios años una afección renal.

En su labor como periodista, Eliseo Alberto fue jefe de redacción de El Caimán Barbudo –donde aprendí a contar, y sobre todo, a preguntar– y subdirector de la revista Cine Cubano. Asimismo, impartió clases y talleres sobre cine en la Escuela de Cine de San Antonio de los Baños, Cuba; en el mexicano Centro de Capacitación Cinematográfica, y en el Instituto Sundace, de Estados Unidos.

Escribió los poemarios Importará el trueno (1975), Las cosas que yo amo (1977) y Un instante en cada cosa (1979). A su decir, abandonó la poesía cuando se divorció de Rosario Suárez.

Radicó en México desde 1990, de dónde adoptó la ciudadanía. Sobre su doble nacionalidad, Eliseo Alberto confesó, de forma agridulce: Cada día pienso menos en Cuba, cada día los problemas mexicanos me ganan más... Está bien que así sea, porque también soy mexicano desde el año 2000. El lío va a ser cuando muera, porque como fantasma me la pasaré volando de la isla a México, voy a ser un fantasma en medio del Golfo de México.

La obra de Eliseo Alberto está marcada por la nostalgia por una ciudad, La Habana. El autor reconoció que sus libros parecen haber sido escritos desde un muro del Malecón, viendo de un lado pasar la vida y viendo del otro pasar los barcos.

Adquirió notoriedad tras ganar el Premio Internacional Alfaguara de Novela 1998 con Caracol Beach. Además, es autor de las novelas La fogata roja (1985), La fábula de José (2000) y El retablo del conde Eros (2008).