Cuernavaca, Mor., 4 de junio. El Centro de Investigación y Docencia en Humanidades del Estado de Morelos (Cidhem) realizó esta mañana un homenaje al escritor Carlos Montemayor e inició una cátedra en su memoria. También se presentó el último libro que escribió, Las mujeres del alba, y se exhibieron fotografías de Rodrigo Moya.

A nueve días de la fecha del cumpleaños del escritor y a un año cuatro meses de su fallecimiento, en este centro los alumnos e invitados de la entidad y de otras partes del país rememoraron la obra de Carlos Montemayor, quien fue catedrático de esta institución de 1996 a 1999.

Los alumnos Jesús Mora y Laura Bensasson, amigos y familiares del novelista, como su hija Victoria y su esposa, Susana de la Garza, evocaron algunos pasajes de la vida de Carlos Montemayor.

Perla Gómez, quien tenía cinco años cuando ocurrió el asalto en 1965 al cuartel de Ciudad Madera, sierra de Chihuahua, que dio paso a la creación de la Liga Comunista 23 de Septiembre, contó algunas visitas que recordó del novelista a su casa, en busca de su padre Pablo Gómez y de su madre, quien es una de las mujeres a las cuales se refiere en su último libro.

Rodolfo Stavenhagen, uno de los relatores del homenaje, abrió su intervención diciendo que si Carlos estuviera vivo, los invitaría a sumarse y participar en la Caravana Ciudadana por la Paz con Justicia y Dignidad, encabeza por el poeta Javier Sicilia, padre de uno de los 40 mil muertos que lleva la guerra contra el crimen organizado.

Incluso, dijo que él (Montemayor) no estaría ahí, en el Cidhem, sino rumbo a Ciudad Juárez, para firmar el pacto ciudadano nacional para cambiar el rumbo del país.

Carlos Montemayor, sobre estas líneas, en una imagen de archivo, cumpliría años el próximo 13 de junioFoto Notimex

Después de ese paréntesis afirmó que conoció a Montemayor en los años 80, cuando el activista estudiaba y defendía la multiculturalidad de México; destacó que el escritor tenía bien arraigado el compromiso de la defensa de las lenguas indígenas.

Jesús Mora, alumno de Carlos Montemayor, dijo que ahora más que nunca hace falta el escritor: con su análisis agudo definiría la situación del país.

El músico Julio Estrada leyó fragmentos de Guerra en el paraíso, en la que Montemayor –dijo– lleva al lector a sentir lo que escribió en esa novela histórica contemporánea. Esa obra tiene como tema central la guerrilla de Lucio Cabañas, combatiente comunista y fundador del Partido de los Pobres en el estado de Guerrero. Con la muerte que narra de Lucio Cabañas, donde dice que le faltaba mucho por hacer, se dijo que en el caso de Montemayor también le faltaba mucho por hacer y ofrecer a los mexicanos, ahora tan dolidos por la violencia e inseguridad en que se vive.

Vicoria, hija de Carlos Montemayor secundó la opinión de Rodolfo Stavenhagen, sobre que su padre apoyaría la Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad.

El homenaje se inició a las 11:30 de la mañana y concluyó después de la una y media de la tarde. El director del Cidhem, Jorge Morales Barud, dio la bienvenida a los asistentes y anunció que se analiza inaugurar cátedras sobre las obras de grandes hombres mexicanos, dirigidas tanto a alumnos de ese instituto como para la población en general, con el propósito de que se conozca, respete y admiren sus obras.