El Partido de la Revolución Democrática (PRD) se apresta a realizar una serie de ajustes financieros, de cara a las elecciones de 2012, que incluye regresar al edificio de Monterrey 50, en la capital del país, como sede nacional.

El proyecto implica derrumbar el actual inmueble para edificar uno nuevo, lo que permitiría un ahorro por renta mensual de 650 mil pesos, destinados tan sólo para el edificio de Benjamín Franklin.

Javier Salinas, secretario de finanzas del partido, explicó que la intención es bajar mucho los costos, particularmente en materia de recursos humanos, ante inminentes reformas estatutarias para ampliar la estructura partidaria, y en particular, la contratación de personal político para el proceso electoral de 2012.

A la fecha, el PRD cuenta con 440 trabajadores en nómina, con una erogación mensual de siete millones de pesos.

En entrevista, el perredista dio cuenta de algunos de los gastos que se avecinan para el sol azteca. La realización del congreso nacional, en agosto próximo, con un gasto presupuestado en 12 millones de pesos, prácticamente la mitad de lo que el partido destinó este año, como apoyos extraordinarios, para los procesos electorales.

Para el estado de México, 5 millones 957 mil 94 pesos; Coahuila, 2 millones 65 mil 801; Hidalgo, 2 millones 583 mil 995; Nayarit, 3 millones 231 mil 963; Michoacán, aproximadamente 5 millones de pesos; más lo que se destinó para Baja California Sur y Guerrero, a principios de año.

Además, de 3 a 5 millones de pesos para ampliar el proceso de refrendo de militantes, al menos para el resto de 2011.

En cuanto a la construcción de la nueva sede, Salinas indicó que se pagará con la venta del edificio que se adquirió durante la gestión de Rosario Robles, ubicado en Insurgentes y Jalapa, en la colonia Roma, y que tantos conflictos económicos generó al partido.

Su compra y supuesta remodelación, que nunca se concretó, provocó un endeudamiento de 90 millones de pesos, que al paso del tiempo se sumó a multas y préstamos para campañas, y propició tan sólo por pago de intereses 99 millones para Banca Afirme. Ahora el edificio se venderá en 49 millones de pesos, uno menos de lo que costó. Está contemplado que la nueva sede sea de seis pisos. Permitiría ahorrar, además de los 650 mil pesos ya citados, 300 mil por renta de inmuebles para cada reunión del Consejo Nacional.

Javier Salinas recordó que cuando inició como secretario de finanzas, el partido tenía un endeudamiento de 715 millones de pesos.