Las sucesivas reformas legales en materia electoral que buscan ampliar la participación de la mujer no han logrado, todavía, incrementar sustancialmente la presencia femenina en la vida política. Si bien en la última elección de 2009 se incrementaron 74 por ciento las candidaturas a diputaciones federales en comparación con 2006, la participación de las mujeres en la Cámara de Diputados corresponde solamente a 27.6 por ciento, dijo el consejero presidente del Instituto Federal Electoral, Leonardo Valdés.

Durante un acto organizado en el IFE para analizar la condición de la mujer en la política, Valdés sostuvo que el ejercicio de los derechos políticos no es resultado de concesión. Refleja su presencia en la vida pública del país, y el interés de las mujeres por participar en la construcción de una ciudadanía más democrática.

Por su parte, la magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, María del Carmen Alanís, dijo que pese a las expectativas de crecimiento de la presencia femenina en la vida política derivadas de la reforma electoral 2007-2008, que introdujo la obligación de los partidos de destinar 2 por ciento de su presupuesto a capacitación y promoción de liderazgos femeninos, en los hechos fue muy marginal el incremento de los cargos asignados a las mujeres. Esto por diversas causas: la reforma pugna por un cambio en el mediano plazo; pese a que los partidos están obligados a asignar 2 por ciento de su gasto en promover a la mujer, en los hechos no tenían un plan de acción para ejercerlo, había insuficiente información al respecto y faltó fiscalización en los recursos.

En su oportunidad, la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, Rocío García Gaytán, consideró que más allá de las promesas, los partidos deben dar muestras claras de estar comprometidos con la equidad de género. Dijo que tienen una oportunidad de mostrar ese interés en la designación de los tres consejeros del IFE que aún faltan, promoviendo la inclusión de tres mujeres de acreditada capacidad.