Ejercicio físico e ingesta alta de vitamina D ayudan en la prevención
Miércoles 25 de mayo de 2011, p. 39
El sobrepeso y la obesidad son causantes de 40 por ciento de los casos de cáncer, principalmente de colon, páncreas y próstata, advirtió Romeo Rodríguez Suárez, comisionado nacional de los Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad.
El especialista señaló la importancia de prevenir el desarrollo de enfermedades con la realización de actividad física y una alimentación adecuada, así como con la ingesta de vitamina D en dosis hasta tres veces más altas que las acostumbradas. Comentó sobre los resultados de investigaciones recientes en las que se demostró el beneficio de la vitamina D para prevenir tumores malignos.
Los estudios comprobaron que en dosis hasta de 4 mil unidades diarias de dicha vitamina se reduce 47 por ciento el riesgo de cáncer de mama, 50 por ciento el de colon y la hipertensión arterial.
A su vez, Salomón Chertorivski, comisionado Nacional de Protección Social en Salud, señaló que con la afiliación al Seguro Popular se redujo 10 por ciento el monto del gasto que los ciudadanos realizan de su bolsa para el pago de consultas y medicamentos.
Ambos funcionarios participaron ayer en el panel Encuentro de líderes del sector salud en México, organizado por la revista Líderes, así como en la presentación de la edición especial de esta publicación, con el tema de la salud. Chertorivski también comentó sobre el cambio necesario en la política nacional sanitaria, con la finalidad de priorizar la prevención.
Destacó que dentro del Seguro Popular, que ya cuenta con 46.4 millones de afiliados, se puso en marcha el programa Estimulación temprana, con la finalidad de que los niños menores de dos años tengan un desarrollo físico y mental óptimo. Además se buscará evitar alrededor de mil 500 fallecimientos por la llamada muerte de cuna.
En relación con el gasto de bolsillo
, el funcionario comentó que si bien aún representa la mitad de la inversión en salud del país, las personas ya no incurren en erogaciones catastróficas, pues el Seguro Popular cubre los tratamientos de los tumores malignos de la infancia, el de mama y cérvico uterino, así como el de testículo y los linfomas no-Hodgkin.
Hasta antes de 2008, cuando el Seguro Popular empezó a financiar los tratamientos oncológicos infantiles, la probabilidad de sobrevivencia para los afectados con leucemia era menor a 30 por ciento. Actualmente la posibilidad de cura es de 70 por ciento.