Jueves 12 de mayo de 2011, p. 18
En México, ocho de cada 10 indígenas son pobres y enfrentan las peores condiciones de desarrollo social y educativo, afirmó Fernando Limón Aguirre, investigador de El Colegio de la Frontera Sur, y destacó que las políticas educativas para las comunidades indígenas sólo perpetúan un círculo de exclusión y pobreza: están orientadas a que sólo sepan leer y escribir en español y hacer cuentas
.
En videoconferencia en la sede del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas), apuntó que entre la etnia chuj, en la frontera de México con Guatemala, no llega a la educación secundaria 80 por ciento de los alumnos que cursan la primaria y menos de 10 por ciento ingresa a bachillerato.
Al presentar un análisis del sistema escolar en las comunidades chuj, con más de 6 mil habitantes en 30 poblados de Chiapas y Campeche, indicó que el modelo de educación intercultural bilingüe de la Secretaría de Educación Pública reproduce la lógica colonialista al imponer una visión cultural ajena a las comunidades y desechar cualquier mecanismos de diálogo
.
En la educación intercultural bilingüe, indicó, no hay lógica de diálogo. La escuela pretende imponerse sobre la comunidad con sus contenidos y estrategias educativas, aunque no den buenos resultados, pues en el imaginario social chuj la escuela sirve para aprender a hablar y escribir en español
.
Por ello, advirtió que la deserción escolar aún está muy presente
en las comunidades indígenas, donde de quienes ingresan a la secundaria no logran egresar ni 50 por ciento, mientras llegar al bachillerato o licenciatura es el triunfo de unos cuantos
.
Al respecto, David Navarrete, profesor-investigador del Ciesas indicó que sólo 2 por ciento de la población indígena accede a estudios universitarios, mientras que el promedio nacional es 28 por ciento para jóvenes de 18 a 23 años.