Según un sondeo, el transporte público es incómodo e inseguro, pero necesario
A corto plazo se agravarán las congestiones viales, dice
Prefieren citadinos Metro y Metrobús
Miércoles 11 de mayo de 2011, p. 36
La construcción de los segundos pisos y la supervía son un engaño, una falsa solución
para mejorar la movilidad de la capital, pues a corto plazo se agravarán las congestiones, aumentarán los tiempos de traslado y se deteriorará la calidad de vida de los usuarios del transporte público, quienes reprobaron éste, pues destinan más de dos horas al día para trasladarse con un gasto semanal de más de 150 pesos, informó Gerardo Moncada, coordinador de transporte eficiente de la organización El Poder del Consumidor.
En la presentación de los resultados del sondeo de opinión sobre la calidad de transporte público en la ciudad de México, Moncada señaló que 67 por ciento de los 2 mil 500 consultados consideraron que es incómodo e inseguro, pero es un mal necesario
.
El 38 por ciento consideró a los microbuses como el peor servicio, seguido de las combis, los camiones de la Red de Transportes de Pasajeros (RTP), el Tren Suburbano y el trolebús. Mientras, cinco de cada 10 personas afirmaron que el Metro es el mejor modo de transporte, y en segundo lugar ubicaron al Metrobús.
Sin embargo, comentaron que el servicio es caro, lo cual en ciudades con bajas tarifas, como el Distrito Federal, sólo se explica por la necesidad de tomar varios transportes y de que el servicio es de baja calidad.
Por otra parte, ante el señalamiento que se hizo a la delegación Álvaro Obregón por dar su visto bueno al proyecto de la supervía poniente sin argumentos y documentos que sustentaran la decisión, ayer el jefe delegacional, Eduardo Santillán, recurrió al Programa Delegacional de Desarrollo Urbano que se aprobó el pasado 24 de marzo y se públicó ayer en la Gaceta Oficial para evadir la omisión y destacar la importancia de dicha vialidad.
En la recomendación 1/2011 que emitió la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal se hace mención que el gobierno de Santillán no sustentó el visto bueno que otorgó a la autopista urbana de cuota porque utilizó documentos posteriores a su fallo.
Además, en la publicación del PDDU no se menciona que su gobierno hizo una consulta, pues la vía de cuota aún carece de la aprobación ciudadana que por ley los gobiernos están obligados a realizar.
Los señalamientos que refiere el funcionario para asegurar la viabilidad del proyecto son las necesidades de conexiones viales que se muestran en dicho programa, pero en ningún punto se menciona la falta que se cometió al dar el aval al proyecto de la supervía.