Alrededor de la medianoche del viernes fueron encontrados los cuerpos de dos universitarios que fueron asesinados a balazos en los límites de la ex hacienda San Ignacio, municipio de Jesús María, conurbado a la capital de Aguascalientes.

Seguridad pública identificó a las víctimas como Emmanuel Cruz Zamarripa, de 22 años, y Michelle Capuchino Barrón, de 21, alumnos de las universidades Autónoma de Aguascalientes y La Concordia.

Ambos cuerpos yacían en un camino de terracería, rumbo a la comunidad Las Palomas. Tenían las cabezas vendadas, estaban descalzos y atados de pies y manos. Cada uno tenía tres impactos de bala en la cabeza.

Ayer se documentaron otros 41 asesinatos y tiroteos de bandas rivales, entre ellos 18 de Chihua- hua. De los cometidos en Ciudad Juárez resaltan los de cuatro, dos de ellas mujeres, que fueron baleados en un vehículo en la colonia México 68. Tres más fallecieron acribillados en la colonia Chaveña, y el viernes fue abatido a tiros Francisco Herrera, cantante y líder del grupo musical El Sapo y su Comando Sierreño.

Respecto de los índices criminales en la urbe fronteriza, el secretario municipal de Seguridad Pública, Julián Leyzaola, admitió que aproximadamente uno de cada cuatro agentes locales trabaja para el crimen organizado, incluidos los jefes. La infiltración es tal, que unos espían y otros participan en acciones delictivas.

En Tamaulipas ocurrieron ocho ejecuciones. Entre los occisos hay tres que fueron acribillados a las 17:30 horas de ayer en el bar La Solución, de Altamira, ciudad en la que también perecieron tres supuestos delincuentes durante un tiroteo.

En Durango se cometieron al menos cinco homicidios. Incluyen los de un decapitado y de dos agentes de la Dirección de Investigación de los Delitos: Manuel de Jesús Escobedo, de 40 años, e Iván Carranza Gómez, de 36. Éstos se transportaban por el bulevar Dolores del Río, cuando hombres abrieron fuego.

Ayer también se informó que los trabajos de búsqueda en la tercera fosa clandestina recién descubierta en la capital duranguense concluyeron el sábado con el rescate de otros dos cadáveres, con lo que suman 159, más 10 de un entierro ilegal en el municipio de Santiago Papasquiaro.

Una persona murió baleada en Mexicali, Baja California, y dos más en Tijuana, donde fue detenido un joven de 18 años que tenía un rifle Barret antiaéreo y antiblindaje. El joven, interrogado por militares, confesó pertenecer al cártel de Sinaloa.

Del resto de las ejecuciones, tres fueron cometidas en Guerrero, una en Jalisco, otra en Sinaloa y una más en Nayarit, donde el gobernador Ney González anunció un cambio en la estrategia de seguridad. La otra víctima era de Nuevo León, donde 11 de 23 policías detenidos del municipio de Guadalupe fueron arraigados y 24 agentes de tránsito renunciaron tras el retiro de sus motocicletas, porque iban a instalar a éstas localizadores satelitales.