Se trata de una pantomima sin futuro
Jueves 28 de abril de 2011, p. 13
La reforma política aprobada en el Senado es un parche más al desastre ocasionado con las modificaciones de 1997, pero con el agravante de que, en esta ocasión, fue elaborada para que no funcione
, afirmaron catedráticos y especialistas de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), quienes subrayaron que desconocemos qué se ofreció o pactó a cambio de que se moviera una reforma que en los hechos no representa ningún avance para el sistema político
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Indicaron que de los diez puntos presentados por el Ejecutivo federal en su iniciativa de reforma política, enviada a los senadores en diciembre de 2009, en la minuta a discusión se incluyeron pocos temas, entre ellos: las candidaturas independientes, relección de senadores y diputados federales, consulta popular e iniciativa ciudadana, pero no se avanza en los mecanismos de elección del Presidente con mayoría absoluta, incrementar a 4 por ciento de votación nacional mínima para que un partido político obtenga el registro, y la modificación en el número de diputados y senadores, entre otros aspectos
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Manuel Larrosa Haro, catedrático de la UAM-Iztapalapa y experto en el sistema político mexicano, afirmó que existen muy pocas posibilidades de que la reforma, pese a ser aprobada en el Senado, prospere en la Cámara de Diputados. Es muy probable que se envíe a la congeladora legislativa, pues no existe ningún compromiso político real para realizar una reforma profunda, frente a un Estado que ha abdicado de sus funciones sustantivas, como garantizar el bienestar de sus ciudadanos en materia de salud, educación, empleo y seguridad
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En entrevista por separado, Telésforo Nava Vázquez, investigador de la UAM y especialista en participación ciudadana y partidos políticos, destacó que ni las candidaturas independientes ni la relección de legisladores estará lista para 2012. No hay tiempo para que se revise y apruebe en los congresos estatales, pero tampoco representa ningún avance, pues una cosa es que existan en la ley las candidaturas ciudadanas, y otra muy distinta que se puedan volver realidad
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Consideró que la aprobación en el Senado de la República de esta iniciativa de reforma no es más que una pantomima política de cara a las elecciones presidenciales de 2012, en la que imperan intereses de grupo
. Advirtió que no será esta clase política la que reforme el sistema de gobierno en México ni acabe con los abusos de poder y la distribución inequitativa de la riqueza; sólo un movimiento ciudadano organizado puede frenar el deterioro acelerado de nuestro sistema político y transformarlo
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Al respecto, Larrosa Haro destacó que somos los ciudadanos los que tenemos que poner un freno a las oligarquías políticas y económicas, pero también a una partidocracia que entró en alianza con los poderes fácticos para entregar recursos vitales para la nación como electricidad, petróleo y fibra óptica. Es necesario que recuperemos el sentido de soberanía con nuestra capacidad de acción política y fuerza popular
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