Bajo el concepto de provisión para cuentas de cobro dudoso, Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) incorporó ya en sus estados financieros de 2010 un monto por mil 319.4 millones de pesos por la venta de combustible, que es justo la deuda dejada por Mexicana de Aviación por ese concepto.

De acuerdo con datos preliminares del estado de resultados de los que se tiene copia, ASA cerró el periodo enero-diciembre de 2010 con una pérdida de operación por 882.4 millones de pesos, donde sus tres líneas de negocios –venta de combustible a la aviación, administración de 19 aeropuertos del país y consultorías especializadas– presentaron números rojos.

Así, por ejemplo, en esta desastrosa situación financiera el organismo descentralizado reportó que sólo cuatro de sus 61 estaciones de combustible, y uno de los 19 aeropuertos que administra, son rentables económicamente; el resto presenta pérdida en sus operaciones, en mayor o menor medida, que en conjunto casi llegan a 900 millones de pesos.

Además, las llamadas oficinas generales, son la instancia que carga con el millonario adeudo de Mexicana de Aviación, sujeta a concurso mercantil y en creciente riesgo de ser declarada en quiebra.

La pérdida en las operaciones de ASA –dirigida desde septiembre de 2008 por el capitán Gilberto López Meyer–, se registró pese a que durante 2010 las ventas de combustible para la aviación y su costo por litro aumentaron más de 29 por ciento.

Al 31 de agosto de 2010 la deuda del Grupo de Mexicana de Aviación con ASA a causa de la venta de combustible era de mil 302.6 millones de pesos, según resultados de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

En su auditoría, esta instancia pidió al órgano interno de control que realizara las investigaciones pertinentes, y en su caso los procedimientos administrativos correspondientes, por los actos u omisiones de los servidores públicos que en su gestión omitieron proteger los intereses del Estado, y permitir que la deuda de Mexicana aumentara de manera importante, a pesar de que la línea aérea ya tenía serios problemas en su situación financiera.

El reporte de ASA, solicitado a través del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (Ifai), señala que de las 61 estaciones de combustible ubicadas en todo el país, sólo reportan utilidades netas las del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (116.1 millones de pesos); Cancún (39.1 millones); San José del Cabo (9.3 millones) y Guadalajara (7.5 millones), con un total del 172 millones de pesos. Sin embargo, en conjunto la línea de negocios ASA Combustible tiene pérdidas por 37.4 millones de pesos.

Sobre la administración de los 19 aeropuertos de la red de ASA, sólo la terminal aérea de Ciudad del Carmen es rentable, con 31 millones de pesos de utilidad al año. Eso se debe a que desde este aeropuerto parten los helicópteros que transportan a los miles de trabajadores de Petróleos Mexicanos que laboran en las plataformas ubicadas en el Golfo de México. La red de aeropuertos administrados por ASA perdió en 2010 un total de 160 millones de pesos.

Dentro del concepto de oficinas generales se registraron ingresos por mil 236 millones de pesos y gastos de operación por mil 921 millones –en este renglón se ubicaron mil 319 millones de la deuda de Mexicana–, para un resultado negativo de 685 millones de pesos. En total, la pérdida de operación de ASA en 2010 fue de 882.4 millones de pesos.