Con una serie de presentaciones que comenzaron hace unos días, el Ballet Independiente celebra 45 años ininterrumpidos en el arte dancístico.

La compañía, con Magnolia Flores en la dirección general y Édgar Robles en la conducción artística, así como el legado de Raúl Flores Canelo –icono de la danza mexicana contemporánea–, estrenó La perfecta imperfección, obra del coreógrafo noruego Fredrick Lorentzen, en la Sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli.

Como parte de los festejos también se estrenarán este año las coreografías PD: llegaremos en el tren de la seis, de Óscar Ruvalcaba; El hombre que nunca estuvo y Arrieros somos, de Édgar Robles.

Durante el próximo mayo, la agrupación tendrá participaciones especiales en los festivales Internacional de Danza Contemporánea Lila López y el del Desierto, ambos en San Luis Potosí.

El 24 de agosto, el Ballet Independiente presentará su programa de aniversario que incluye las coreografías La espera, Jaculatoria y Soliloquios, de Raúl Flores Canelo, en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris (Donceles 36, Centro Histórico), en septiembre ofrecerá una función por sus 45 años, en el Centro Nacional de las Artes, y se publicará un catálogo del acervo cultural de la compañía.

Hasta el momento, la agrupación tiene confirmada una presentación en el Palacio de Bellas Artes, pero aún se determina la fecha.

En entrevista con La Jornada, Magnolia Flores subraya que el Ballet Independiente se mantiene vigente porque tiene la misión de transmitir el sentir de los mexicanos en sus obras y mostrar en el escenario lo que sucede en el país, sin imitar modas o corrientes dancísticas de otros países.

“Para dar continuidad al trabajo coreográfico de Raúl Flores Canelo –explica Magnolia Flores– es necesario ser una compañía auténtica para transmitir lo que sienten y piensan los mexicanos. Es fundamental crear una danza comprometida estética y socialmente.”

Comienza etapa de renovación

Magnolia Flores, directora general del Ballet Independiente, asevera que la agrupación tiene el reto de continuar con el legado de Flores Canelo y reforzar en sus propuestas coreográficas la visión de identidad que ha caracterizado a la compañía desde su fundación en 1966.

A su vez, Édgar Robles manifiesta la importancia de celebrar 45 años ininterrumpidos de la agrupación, luego de desaparecer los ballets Teatro del Espacio y Nacional de México. Es la única compañía de danza contemporánea con esta trayectoria y la clave ha sido adaptarse al nuevo tiempo. Magnolia ha dado continuidad al proyecto.

El Ballet Independiente, enfatiza su director artístico, comienza una etapa de renovación, pero retoma los fundamentos que lo vieron nacer y el discurso de Flores Canelo que sigue vigente.

Respecto del principal reto de la compañía, Robles adelanta que la idea es consolidarse como un proyecto artístico auténtico, sin olvidar sus raíces y la propuesta coreográfica de su fundador.

Magnolia Flores, a su vez, informa que a partir de este año la agrupación recibe apoyo económico del programa México en Escena, del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca), ya que dejaron de percibir el donativo del Instituto Nacional de Bellas Artes. Ahora dependen de la renovación de la beca del Fonca.

Este año, Ballet Independiente tiene 40 funciones confirmadas, las cuales se realizarán en los teatros de la Ciudad Esperanza Iris, Benito Juárez y Raúl Flores Canelo, del Centro Nacional de las Artes, así como en reclusorios, hospitales y ferias.