Horacio Cervantes pidió a los medios de comunicación que no empiecen a vender humo de que uno está presionado o disgustado por la designación del árbitro Marco Antonio Rodríguez para dirigir el duelo Cruz Azul-Chivas.

Pese a las malas experiencias con el referido silbante, el zaguero aseguró que no le guarda ningún rencor y que este sábado no sólo lo saludará, sino que respetará las decisiones que tome.

Creo que es el mejor árbitro que hay ahorita, ojalá lo demuestre como en cada partido, comentó el zaguero en la conferencia de prensa de ayer en el estadio Azul.

–¿Puedes trabajar tranquilo tomando en cuenta lo que sucedió en el reciente partido?, se le preguntó, ya que en el anterior encuentro contra Toluca lo expulsó, pero la Comisión Disciplinaria corrigió el error del silbante y levantó el castigo de tres partidos que le habían fijado a Cervantes.

–Tengo que trabajar tranquilo, porque lo que sucedió ya no lo puedo cambiar. Es cosa del pasado, no me puedo hacer telarañas de que va a pasar algo, porque el único perjudicado seré yo.

“Debo imaginar que pitará el mejor árbitro que hay en el futbol mexicano y, más allá de lo que pueda suceder en la cancha, hacer mi máximo esfuerzo, concentrarme en ayudar a mi equipo.

Reiteró que no debe meterse con las decisiones del silbante y que lo ocurrido ante Toluca simplemente fue una experiencia, en la cual creo que él como ser humano y yo, o los que estuvimos involucrados, aprendimos algo.

Recordó que el compromiso del sábado será muy importante para los dos equipos, debido a que nos jugamos la clasificación.

El mediocampista Gonzalo Pineda, mientras tanto, estimó que será un partido para retomar el nivel, rencontrarnos con el triunfo y consumar el pase a la liguilla.