La Paz, 17 de abril. El gobierno de Bolivia ofreció a la organización sindical más influyente del país, la Central Obrera Boliviana (COB), derogar un decreto oficial de 1985 que implantó el modelo de libre mercado en la economía nacional, 11 años antes de que llegara Evo Morales a la presidencia.

Una comisión gubernamental se reunió sábado y domingo con representantes de maestros y mineros de la COB, que rechazaron el aumento de 10 por ciento planteado recientemente por el mandatario para resarcir los efectos del alza de precios en 2010, marcado por el incremento a los combustibles.

Las delegaciones, que dialogaron toda la noche del sábado al domingo y durante la mañana, buscan desactivar la protesta emprendida por los trabajadores hace 10 días en La Paz. Esta es la segunda ronda de negociaciones entre las partes; el fin de semana anterior deliberaron 17 horas, con Evo Morales al frente de la mesa.

El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, informó que las pláticas se han centrado en el análisis y la construcción de consensos sobre un documento de ocho puntos presentado por los miembros de la COB, el cual incluye la petición de 15 por ciento de aumento salarial.

Anunció que en principio estuvieron de acuerdo en abrogar el Decreto Supremo 21060, de 1985, con el fin de continuar con el desmantelamiento institucional de gobiernos neoliberales que antecedieron al de Morales.

Los sindicatos han cuestionado la vigencia del decreto, porque atenta contra la estabilidad laboral y abre las puertas a trasnacionales en áreas estratégicas, según un despacho de la Agencia Boliviana de Información.

Sobre el incremento salarial, Navarro apuntó que las partes acordaron que el tema será tratado al final de las negociaciones, que continuaron este domingo sin plazo perentorio.

Desde la ciudad de Cochabamba, en el centro del país, el presidente reiteró su oposición al 15 por ciento de alza salarial y destacó que su gobierno jamás aprobará un incremento para los trabajadores que sea inferior a los índices inflacionarios, que en 2010 fue de 7.12 por ciento.

Por tanto, continuó, con el aumento dispuesto de 10 por ciento hay un incremento de casi 3 por ciento en los haberes de los trabajadores.