Madrid y Ámsterdam, 11 de abril. Ver cine en Internet de forma legal y con películas aún no estrenadas será posible a partir de hoy y durante un mes gracias al Festival de Cine Invisible, la primera muestra online que se celebra en España.

Este nuevo certamen nace con el propósito de dar a conocer el cine español y europeo que no ha encontrado distribución para llegar a las salas comerciales de España ni para su edición en devedé.

Así, a través de la web de la muestra (www.festivalcineonline.com), los usuarios podrán acceder de forma gratuita a títulos como La vida útil, del cineasta uruguayo Federico Veiroj –que compitió en la sección Nuevos Directores en el pasado Festival de San Sebastián– o Tournée, con la que el actor francés Mathieu Almaric debutó dirigiendo un largometraje de ficción.

Paralelamente, habrá una retrospectiva dedicada a las joyas del cine español como Calle Mayor, de Juan Antonio Bardem, o Viridiana, de Luis Buñuel.

El jurado, compuesto entre otros por el periodista Boris Izaguirre y el cineasta Daniel Sánchez Arévalo, premiará a la mejor película con 3 mil 600 dólares y su edición en devedé.

Mientras tanto, en Holanda se lanzó una cruzada frontal contra la piratería de música, videos y libros electrónicos en Internet.

El gobierno de La Haya prepara una nueva legislación que prohibirá las descargas ilegales desde la red, confirmó hoy el secretario de Estado holandés de Justicia, Fred Teeven.

Desde septiembre se pondrá punto final a la posibilidad de que los usuarios holandeses puedan robar material sonoro o visual de la web, a menos que paguen.

Holanda, uno de los países de la Unión Europea (UE) con mayor penetración de Internet (vía línea fija o celular) en los hogares, tiene actualmente una legislación relativamente laxa, que permite que un usuario descargue música o imágenes en su domicilio y lo copie, siempre que sea para uso doméstico o privado.

Según Teeven, en el gobierno de coalición formado por el partido demócrata-cristiano CDA y por los liberales de derecha del VVD, con apoyos puntuales del islamófobo PVV, en breve esta excesiva libertad (y gratuidad) quedará abolida por una legislación que apuntará a proteger la propiedad intelectual de los artistas.

No se trata de convertir al Estado holandés en policía o represor, subrayó Teeven en declaraciones hoy a la radio pública holandesa.

“No vamos a dedicarnos a la ‘caza de brujas’ ni vamos a perseguir, por ejemplo, a los consumidores de música menores de edad. Algunas voces críticas han querido desacreditarnos: dicen que vamos a cortar cabezas, pero no será así. Tampoco pensamos cerrar páginas webs –siempre que trabajen en la legalidad, como ocurre en el Reino Unido o Francia–; sólo queremos buscar equilibrio”, puntualizó Teeven.

A pesar de las suaves palabras del responsable holandés de Justicia, sus planes, que se convertirán en ley, quizá con algunas enmiendas dulcificadoras, prevén medidas muy contundentes.

Entre ellas, el cierre de páginas web que ofrezcan descargas gratuitas ilegales y también la instalación de filtros de Internet específicos para bloquear –y convertir en inaccesibles– las páginas web internacionales que se dediquen a este tipo de práctica abusiva.