Reprimen protestas en Egipto y Yemen; al menos 5 decesos, el saldo
Domingo 10 de abril de 2011, p. 25
Amán, 9 de abril. Un grupo pro derechos humanos elevó a 37 el número de manifestantes muertos el viernes por la represión en Siria, al tiempo que la oposición denunció que la policía disparó contra un cortejo fúnebre en la ciudad de Deraa.
Fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los dolientes, cerca de una mezquita en la ciudad de Deraa, luego de un funeral para manifestantes que perdieron la vida en protestas en favor de la democracia, manifestaron testigos.
La policía usó municiones y gas lacrimógeno para dispersar a miles de personas que entonaban consignas por la libertad a poca distancia de la vieja mezquita Omari, cerca de la frontera con Jordania.
La seguridad siria cometió (en Deraa) lo que podría ser llamado un crimen contra la humanidad. Disparó indiscriminadamente contra los manifestantes y mató e hirió a decenas
, sostuvo el grupo sirio de Derechos Humanos
Mientras tanto, en El Cairo por lo menos dos muertos dejó la represión de una protesta en la emblemática Plaza Tahrir, que exigía enjuiciar al ex presidente de Egipto Hosni Mubarak. Cientos de manifestantes anunciaron que continuarán con sus movilizaciones y demandaron que la fuerza armada entregue el poder a civiles.
Según testigos, las fuerzas de seguridad utilizaron porras eléctricas y palos para disolver la concentración, luego de que miles decidieron quedarse en la plaza hasta que sea juzgado el mandatario.
En Yemen, la policía mató a tres manifestantes. Setenta fueron heridos por las fuerzas de seguridad en la ciudad de Taez, epicentro de las protestas, contra el presidente Alí Abdalá Saleh.
Según responsables del hospital de campaña instalado cerca del lugar de las manifestaciones, centenares de manifestantes, quienes reclamaban la salida del presidente Abdalá Saleh, resultaron intoxicados a consecuencia del uso masivo de gas lacrimógeno durante los enfrentamientos registrados por la noche.
En Bahrein, las fuerzas de seguridad detuvieron a Abdulhadi Khawaja, prominente activista de derechos humanos del país, quien había llamado a derrocar a la monarquía.