Nueva York. El toletero dominicano Manny Ramírez se retiró de los diamantes tras ser notificado de una cuestión en la política de drogas en Grandes Ligas y prefirió decir adiós como jugador activo de Mantarrayas de Tampa Bay, equipo con el que había firmado una temporada por 2 millones de dólares, en vez de continuar con el proceso de rehabilitación. Ramírez fue suspendido 50 partidos en 2009 por dopaje cuando jugaba con Dodgers. Por otra parte, el entrenador de Barry Bonds, Greg Anderson, salió en libertad luego de estar en prisión tres semanas al negarse a testificar en el juicio por perjurio que se sigue al ex jonronero de Gigantes de San Francisco.