Empresarios anuncian que se afectará a 5 mil empleados y 30 mil jornaleros
Las principales industrias del sector sostienen que se frenarán sus planes de expansión
Jueves 21 de octubre de 2010, p. 5
Las dos principales empresas tabacaleras del mundo, British American Tobacco y Philip Morris, afirmaron que mantendrán sus operaciones en México pese al aumento de impuestos aprobado por la Cámara de Diputados, pero advirtieron que difícilmente se podrán concretar los planes de expansión en las exportaciones de cigarrillos, así como nuevos planes de inversión en el futuro.
El director de Asuntos Corporativos y Regulatorios de British American Tobacco, Carlos Humberto Suárez, lamentó la decisión de los legisladores porque –dijo– se pierde el potencial comercial de México alcanzado con los tratados de libre comercio y se abre la puerta a operaciones ilegales de mercado negro en sus modalidades de piratería, contrabando y robo de mercancía, sin contar los efectos sobre unos 5 mil empleos, a los propietarios de 400 mil puntos de venta y 30 mil jornaleros agrícolas.
Revés a la derrama al campo
Además, según las mismas empresas tabacaleras, se afectaría una derrama anual al campo mexicano de 420 millones de pesos; contribuciones fiscales por concepto del impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) por unos 13 mil millones de pesos, además de aportaciones a las finanzas públicas por otros conceptos de unos 23 mil 500 millones. Del precio de venta de cada cajetilla, 13 de cada 20 cigarros se dedican a impuestos
, afirmaron.
Con todo y el incremento al impuesto de los cigarrillos ambas empresas coincidieron en señalar que se mantendrán en el mercado mexicano pero sin la expectativa de crecimiento que se tenía planeada con base en el esquema fiscal anterior.
La British American Tobacco es la segunda empresa tabacalera más importante del país, con actividades desde 1924 al integrar a Cigarrera la Moderna en 1997. Informes de la propia empresa señalan que tienen una participación de mercado arriba de 35 por ciento y cuenta con más de 200 mil puntos de venta. Anualmente produce más de 12.5 millones de cigarros para el mercado nacional. Sus mayores exportaciones de cigarrillos son hacia Canadá, con 50 por ciento de la producción total, mientras que 25 por ciento de hoja de tabaco se envía al exterior para surtir otras de sus plantas en el mundo. Sus principales marcas son Dunhill, Pall Mall, Camel, Lucky Strike, Montana y Raleigh.
Carlos Humberto Suárez se quejó de que este año habían realizado importantes inversiones
para la instalación de una nueva máquina especial para la producción de su marca Dunhill y utilizarla de plataforma para exportar al resto de América Latina. Sin embargo, subrayó, con el cambio en las reglas fiscales aprobado por la Cámara de Diputados no se puede prever que esa plataforma de exportación pueda crecer.
Recordó que el año pasado ya se había aprobado el esquema fiscal que contemplaba un aumento de impuestos programado para culminar en 2012. Pero ahora con el cambio de las reglas del juego es una pena no poder planear nuevas inversiones, aumentar las exportaciones y teme que se abra la puerta al mercado negro en sus peores modalidades como son la piratería, el contrabando o el robo de mercancía
, lamentó.
Por su parte, Philip Morris México manifestó que el cambio genera preocupación y es una medida que rompe con la certeza jurídica necesaria e impactará la generación de nuevas inversiones y la creación de empleos. El impuesto al tabaco siempre es la salida fácil
y confiamos en que los senadores tomen cartas en el asunto y pongan por delante la certidumbre jurídica y la competitividad del país
, dijo la empresa.
Philip Morris afirma tener 2 mil 600 trabajadores en México, donde seis de cada 10 cigarrillos son vendidos por medio de sus marcas principales: Marlboro, Delicados, Benson & Hedges, Faros, Elegantes y Chesterfield. Cuenta con plantas en la ciudad de México y Guadalajara.
Philip Morris México está sumamente preocupado. La decisión de incrementar nuevamente el impuesto especial al tabaco rompe con el principio de certeza jurídica que el país requiere para atraer nuevas inversiones y crear empleos. Esta misma legislatura que el año pasado aprobó incrementar el impuesto de forma programada, durante los próximos tres años, decide hoy ir en contra de lo que ellos mismos reflexionaron y aprobaron hace menos de 12 meses. La industria del tabaco es hoy el contribuyente privado más grande de México y lo seguirá siendo, si así se desea, siempre y cuando exista certeza jurídica. Sin duda, este tipo de decisiones improvisadas ponen seriamente en riesgo nuestros planes de inversión y expansión y amenazan cientos de empleos directos e indirectos que se generan en toda la cadena productiva, empezando por el campo
, expresó la empresa.