Ha mejorado el ambiente de trabajo, considera el representante especial de México
Esperan progresos importantes en la preparación de la cumbre de Cancún sobre el tema
Domingo 3 de octubre de 2010, p. 38
Luis Alfonso de Alba, representante especial de México para la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático, aseguró que en los últimos meses se ha logrado mejorar el ánimo, la metodología y el ambiente de trabajo entre los países miembros.
Debido a lo anterior, confió en que se podrán dar pasos importantes en el último periodo de negociación formal rumbo a la cumbre de Cancún, que se realizará en noviembre próximo.
Dichas negociaciones se llevarán a cabo en China a partir de este lunes. Ahí, los dos grupos de trabajo, que tienen un documento base de entendimiento, van a tratar de avanzar lo más posible, para reducir los pendientes que se tendrían que resolver en la reunión de México, agregó.
Reconoció que las pláticas para evitar el deterioro ambiental han sido complicadas, pero hay un mejor ánimo y se ha mejorado el ambiente de trabajo. Con ello, el representante mexicano aludió a la desconfianza y el desánimo que se generó entre los estados a causa del fracaso de las negociaciones de Copenhague.
Entrevistado en el contexto de una reunión con representantes indígenas que presentarán a la cumbre de Cancún sus puntos de vista sobre el tema ambiental, Luis Alfonso de Alba señaló que tras el encuentro de Dinamarca la comunidad internacional se ha centrado en el objetivo global de no permitir que el incremento de la temperatura promedio rebase los dos grados centígrados.
Añadió que de Cancún se puede salir con un acuerdo para aumentar los recursos financieros disponibles para mitigación y adaptación y con mecanismos que faciliten el acceso a esos recursos.
También dijo que durante el actual proceso de negociación, los países han puesto en la mesa propuestas que no son despreciables, para disminuir sus emisiones. Si bien son inferiores a lo que recomienda la ciencia, son mayores con respecto a los compromisos ya logrados, incluido el Protocolo de Kyoto.
Señaló que países como México y Brasil se han comprometido en términos del porcentaje de reducción de emisiones con respecto a tendencias inerciales, es decir, si no se hiciera nada se llegaría a determinado número de toneladas. A partir de esa cifra, México ha ofrecido una disminución de 30 por ciento para 2020, Indonesia 26 por ciento y Brasil 36-38 por ciento. Estados Unidos, por su lado, ha ofrecido 17 por ciento, aunque no es con respecto a tendencia inercial, sino a los niveles de 2005.
El representante especial dijo que estas cifras pueden cambiar en el transcurso de la negociación y confió en que sea al alza. Resaltó que se trabaja para que estos compromisos se pongan en blanco y negro y se desarrollen mecanismos que permitan su revisión periódica. Muchos de ellos están condicionados a transferencias de recursos financieros y de tecnología. Si hay más transferencia de los países desarrollados a los que están en desarrollo, será mucho más lo que puedan hacer estos últimos.