El recién designado delegado pontificio para la Legión de Cristo, el arzobispo Velasio de Paolis, no sólo necesitará actuar con prudencia y valerse de un ejercicio militar para dar órdenes sin que haya discusión, sino también de suerte para tener éxito en su encomienda, pues son muchos los intereses que están de por medio, consideró José Barba, quien en su infancia fue víctima de los abusos sexuales de Marcial Maciel, fundador de la congregación.

En entrevista con este diario, precisó que aunque el delegado papal cuenta con experiencia y capacidades en asuntos de la Iglesia, particularmente en el manejo de finanzas, y es especialista en derecho canónico, además de ser muy cercano a Benedicto XVI, tiene una tarea difícil ante sí, debido a que los legionarios son expertos en el arte de cautivar, y también existe una capa de resistencia y disimulo en sus altas estructuras, pese a que mediáticamente se demuestra sumisión.

“Es una labor difícil; ellos son maestros en cautivar a la gente, espero que sea (De Paolis) un hombre realista, con mucho discernimiento de espíritu y sepa hacer las cosas suavemente en cuanto a la manera, pero firmemente en cuanto a la sustancia; le deseamos suerte porque la va a necesitar, pues son muchos los intereses que hay de por medio.

Será difícil que haya cambios inmediatos; si la desestructuración dura más de cuatro años será signo de que la cosa está mal, de que la estructura no se rinde, pero hay que esperar lo mejor.

Barba, quien formó parte del grupo de ocho ex legionarios que denunciaron los actos pederastas de Maciel, calificó a De Paolis como un hombre de experiencia, pues ha sido integrante del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica, además de que es de toda la confianza del Papa, próximo al cardenal Tarcisio Bertone (secretario de Estado vaticano) y es experto en finanzas de la Iglesia.

Consideró que con esta designación Benedicto XVI evidencia que quiere salvar lo salvable de la legión e ir al fondo del asunto. Añadió que pese a que los legionarios han recibido las determinaciones pontificias con obediencia, yo vi eso desde 1956, y una cosa son las palabras y otras los hechos.

Aparte, el obispo Doménico Sigalini, asistente eclesiástico del Foro Internacional de Acción Católica (FIAC), señaló en conferencia de prensa realizada con motivo del sexto Encuentro Continental Americano de Acción Católica, que muchos legionarios jóvenes que han decidido donar su vida a Jesús saben que la situación por la que atraviesa su congregación y los cambios que en ella se avecinan sólo son una nueva página. Subrayó que el asunto de la pederastia clerical es grave, pero que no hay que perder de vista que está focalizado, por lo cual llamó a no exagerar las cosas.

Asimismo, consideró que los periodistas deben darle una justa dimensión a estos asuntos. Cabe destacar que los abusos sexuales de sacerdotes en contra de niños se han documentado desde hace más de medio siglo, y que en el caso de la Legión de Cristo las primeras denuncias también datan de los años 50.