Se presentan al menos tres denuncias al día por este delito: Óscar Montes de Oca
Viernes 4 de junio de 2010, p. 35
El 85 por ciento de las extorsiones telefónicas que se denuncian ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal se planean desde el interior de algún reclusorio de la capital o federal, afirmó el fiscal antisecuestros de la dependencia, Oscar Montes de Oca.
En conferencia de prensa, el funcionario detalló que diariamente la PGJDF recibe aproximadamente tres denuncias por este delito. Agregó que, en promedio, por cada cien llamadas hay dos víctimas de una extorsión.
En los últimos meses, las autoridades han desarticulado bandas dedicadas a esta actividad lideradas por internos de la penitenciaria de Santa Martha y el Reclusorio Norte, quienes eran los encargados de llamar a las probables víctimas para exigirles fuertes cantidades de dinero, utilizando el método del familiar secuestrado o el pariente detenido en el aeropuerto por no haber declarado la cantidad de efectivo que traía.
En este tenor, la PGJDF investiga a dos mujeres que operaban en el estado de Jalisco y que tenían la función de retirar el dinero que las víctimas depositaban en distintas cuentas bancarias. Según Montes de Oca las primeras investigaciones señalan que las extorsiones provienen de penales de la citada entidad.
El fiscal señaló que hay dos averiguaciones abiertas en las que las víctimas son residentes de la ciudad de México desde el estado de Jalisco. Abundó que no se descarta que haya más casos.
Sandra Berenice Vargas y Juana Elizabeth Cárdenas fueron detenidas en los municipios de Tlaquepaque y El Zalate, respectivamente, quienes obtuvieron en un mes entre 20 mil y 30 mil pesos, que retiraron de cuentas bancarias abiertas poco después de realizada la extorsión.
Según el fiscal antisecuestros, los presuntos extorsionadores elegían de forma aleatoria a sus víctimas, a quienes engañaban diciéndoles que eran familiares provenientes de Estados Unidos, que habían sido detenidos por las autoridades aduaneras por no declarar los objetos que pretendían ingresar al país.