Martes 1º de junio de 2010, p. 21
Panamá, 31 de mayo. Una cifra cercana a los 150 muertos, miles de damnificados, viviendas destruidas, desborde de ríos que provocaron deslaves, además de pueblos incomunicados, es el saldo que dejó Agatha hasta ahora, la primera tormenta tropical del año que azotó el fin de semana a Guatemala, El Salvador y Honduras.
Paco Maldonado, coordinador de la Unidad Panamericana de Respuesta a Desastres de la Cruz Roja, con sede en Panamá, reportó la muerte de 144 personas en los tres países, 118 de ellas en Guatemala, el país más afectado, además de 17 en Honduras y nueve en El Salvador.
Por otro lado, en Ciudad de Guatemala, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) estableció su propio balance de la destrucción en el país con 109 fallecidos, 62 desaparecidos, 27 mil 560 damnificados y 150 mil 776 desalojados de áreas de alto riego.
De acuerdo con el informe, cientos de viviendas, comercios y fábricas quedaron anegadas con lodo, mientras que la carretera que comunica a la capital guatemalteca sigue cerrada por toneladas de piedras y tierra que dejaron atrapados a decenas de vehículos en las rutas.
La mayoría de las víctimas son indígenas, comunidad que representa casi la mitad de la población y es el sector más pobre en este país. Su vulnerabilidad se observa en la construcción de sus viviendas, hechas de manera endeble y establecidas en zonas de riesgo, como laderas de los cerros o a orillas de los ríos, principalmente de los departamentos de Chimaltenango, Guatemala y Quiché.
La tormenta tropical siguió a la erupción, el jueves, del volcán Pacaya, situado en el departamento de Escuintla, a 40 kilómetros de esta ciudad, que provocó la muerte de dos personas, cuatro desaparecidas y casi dos mil evacuadas.
Ante estas tragedias, el gobierno dijo que contraerá un préstamo de 85 millones de dólares con el Banco Mundial para hacer frente a la catástrofe.
De su lado, las autoridades de Aeronáutica Civil anunciaron que el aeropuerto internacional La Aurora, en ciudad de Guatemala, podría ser reabierto la tarde del martes, luego de retirar la pista toneladas de arena y ceniza lanzadas por el volcán.
En Honduras, Agatha dejó 17 fallecidos, la mayoría arrastrados por las corrientes de los ríos que salieron de sus cauces, además de un desaparecido, 3 mil 227 evacuados, 2 mil 168 personas en albergues, de acuerdo con la estatal Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), que añadió que más de 63 viviendas y once quedaron destruidos. Entre tanto, el aeropuerto internacional de Tegucigalpa sigue cerrado.
El Salvador se mantiene la cifra de nueve fallecidos, dos desparecidos y cerca de 9 mil damnificados, reportó el Sistema Nacional de Protección Civil.
Los gobiernos de México, Costa Rica y Colombia, además de Francia, expresaron su pésame por las víctimas de los países centroamericanos afectados por la tormenta tropical, y manifestaron su solidaridad y ayuda.
De la misma manera, el secretario general de la organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, envió sus condolencias a los gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvados y manifestó su disposición de ayudar a aquellos países que así lo soliciten, en tanto que Estados Unidos anunció asistencia a Guatemala por 112 mil 500 dólares y el envío de helicópteros para la búsqueda y rescate de personas.