Aprovechan que los demandantes no saben que las asesorías son gratis: Ramón Montaño
Admite el titular de la instancia que las instalaciones son insuficientes para dar buen servicio
Lunes 17 de mayo de 2010, p. 37
Diariamente, 5 mil personas acuden a las oficinas de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) en espera de que se resuelva su demanda individual o colectiva presentada por despido injustificado, cierre de empresa, negativa a cubrir su liquidación, emplazamientos a huelga y/o demandas de titularidad de contratos.
La ignorancia sobre el apoyo jurídico gratuito que otorga su personal ha provocado que algunos usuarios caigan en manos de los llamados coyotes, ubicados en las propias escalinatas de la junta, que les ofrecen sus servicios para recuperar la indemnización a que tienen derecho, haciéndose pasar por empleados, funcionarios o abogados de la instancia laboral.
A cambio, les hacen firmar un “contrato cuota litis”, con el que el trabajador se compromete a entregarle cierto porcentaje de lo obtenido durante el proceso, pero no sólo se quedan con la liquidación, sino también, a veces, con la vivienda o carro, situación que se busca erradicar mediante carteles pegados en las paredes del tribunal laboral, pero no han tenido los resultados deseados.
El presidente de la JLCA, Ramón Montaño, reconoce que la realización diaria de mil 500 a 2 mil audiencias y la atención de más de 71 mil expedientes en un espacio tan pequeño donde laboran 950 personas, entre empleados, choferes, administrativos, conciliadores y actuarios, con un calor que supera los 35 grados centígrados, impide, muchas de las veces, evitar los problemas de coyotaje.
La meta es acabar con este tipo de prácticas que afectan a los trabajadores, así como cumplimentar los expedientes en trámite, que a finales de marzo sumaban 71 mil 560. De ellos, 70 mil 156 son asuntos individuales y el resto, mil 404, son colectivos, al integrarse en el primer trimestre del año 9 mil 52 casos, cifra 11.9 por ciento menor a la registrada en igual periodo del año pasado, cuando sumaron 10 mil 280, precisó.
Dicha tendencia se observó también en el número de huelgas estalladas en este lapso, que cayó 66 por ciento, al registrarse tres, contra nueve del año pasado: una gasolinera ubicada en Tlalpan, un hotel en Periférico y la del STUIEMS. Montaño prevé que la situación económica de Europa nos pegará, al reflejarse en cierres o despidos de personal de empresas que tengan relaciones comerciales en esa zona
, comentó.
La junta es un termómetro
de lo que sucede en materia económica y nuestra obligación es ofrecerle a los usuarios la mejor atención, lo cual varias veces deja mucho que desear en materia de espacios, pues los empleados de las 17 juntas realizan sus tareas encima de pilas de expedientes, codo con codo, mientras los usuarios ocupan los espacios libres, ante la falta de espacio
, reconoció.
Recientemente, se solicitó al Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales que entregue en comodato el edificio que hasta hace un año ocupaba la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, el cual está abandonado y se ha convertido en una cueva de maleantes
, con el propósito de crear dos nuevas juntas y un Ministerio Público, donde la gente presente sus denuncias, a fin de acabar con los llamados coyotes. Aún esperan respuesta.
El reto, dijo, es grande, pero estamos en condiciones de asumirlo y atender todos los casos que lleguen en espera de contar con un mejor espacio de trabajo y la tecnología necesaria para digitalizar los miles de expedientes que se tienen desde 1940, los cuales se encuentran en cajas en áreas no apropiadas, cuando son parte de la historia de esta gran ciudad.
Baja el desempleo
Por otra parte el Instituto Nacional de Estadística y Geografía informó que el desempleo en la ciudad de México disminuyó en el primer trimestre del año, al ubicarse en 6.3 por ciento, aunque 263 mil 117 personas perdieron su empleo o terminaron su contrato, renunciaron o cerraron su negocio mientras un millón 250 mil encontraron trabajo en el sector informal, y 2 millones 163 mil 429 asalariados no tienen acceso a instituciones de salud, y un millón 63 mil 459 carece de un contrato escrito.