Variaciones importantes en el número de genes que lleva el genoma de una persona se han vinculado con la esquizofrenia, en un estudio que aporta nuevos indicios sobre el papel esencial que desempeña la genética en el riesgo de desarrollar esta enfermedad, que afecta a una de cada 100 personas. Científicos han descubierto que los pacientes de esquizofrenia tienen más probabilidades de presentar variaciones en el número de copias de ciertos genes. Se comparó el ADN en los genomas de mil 735 adultos que padecen esquizofrenia con el de 3 mil 483 personas sanas. Los investigadores encontraron significativas diferencias entre los dos grupos en términos de variaciones en el número de copias de cada gen incluido en un genoma dado. Cuando comparamos el genoma de pacientes de esquizofrenia con los de sujetos sanos, encontramos variaciones en genes que regulan las funciones cerebrales, de varios de los cuales ya se sabía que están perturbados en pacientes de este desorden, indicó Hakon Hakonarson, director del Centro de Genómica Aplicada del Hospital Infantil de Filadelfia. El doctor Hakonarson, cuyo estudio se publica en la revista Proceedings, de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos, señaló que saber la forma en que los genes participan en la esquizofrenia podría conducir a nuevas formas de tratamiento.

Steve Connor/ © The Independent/ Traducción: Jorge Anaya