Funcionarios estatales le organizan reunión con dádivas y porras
Martes 11 de mayo de 2010, p. 29
Xonacatlán, Méx., 10 de mayo. Más que un festejo del Día de las Madres pareció un acto proselitista de Enrique Peña Nieto. El gobernador estaba con su público predilecto. Miles de madres gritaron hasta desgañitarse, como ante un galán de telenovela.
Cientos de mujeres perdieron la compostura al ver pasar al mandatario. Algunas subieron a sillas y mesas y algunas más intentaron franquear las vallas metálicas para tocar a quien se ha convertido en una suerte de estrella de televisión.
A la unidad deportiva de esta demarcación, ubicada unos 10 kilómetros al norte de Toluca, fueron convocadas poco más de 5 mil mamás del valle de Toluca.
A las nueve de la mañana ocuparon el sillerío para el acto que arrancaría tres horas después. Se les sirvieron frijoles, arroz, picadillo, una lata de refresco Pascual y una galleta.
Luego, funcionarios de la Secretaría de Educación ataviados con camisolas rojas les entregaron un obsequio de parte del gobierno mexiquense: una caja verde con el logotipo que identifica a la administración de Enrique Peña, que contenía una bolsa de manta y un juego de maquillaje de bolsillo. También se repartieron boletos para la rifa de licuadoras, planchas, refrigeradores y hornos de microondas.
Para amenizar la espera hubo un mariachi. Las presentes debían estar atentas a las indicaciones de los funcionarios de la Secretaría de Educación.
El encargado de las porras al mandatario fue Jorge Alejandro Neyra, director del Centro de Estudios Tecnológicos de Santiago Tianguistenco, quien fue secretario general del Instituto Electoral del estado de México en los comicios de 2005, cuando Peña Nieto fue electo gobernador.
¡presidente, presidente!Foto MVT
Las quiero ver animadas ahora que llegue el gobernador. Que sienta el cariño que le tienen
, dijo de una mesa a otra. Minutos después Peña Nieto apareció y con él, el grito de ¡presidente, presidente!
No faltó la letanía Enrique, bombón, te quiero en el colchón
y “Enrique, si no traes a La Gaviota (la actriz Angélica Rivera, novia del gobernador), aquí tienes a tu guajolota”.
Peña Nieto tardó poco más de media hora en llegar al presidium. En su trayecto repartió besos, abrazos y autógrafos. No nos lo perdemos. Ahora seguido lo vemos en televisión
, dijo una joven con un niño en brazos.
Luego de la celebración, Peña Nieto desestimó la denuncia que el Partido Acción Nacional (PAN) presentó ante la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Electorales por el uso de recursos del erario en reuniones partidistas.
Enrique Peña reconoció que fue a Puebla, pero no a un acto proselitista, sino a una reunión con empresarios que tienen industrias en el estado de México, y luego a una comida, a la cual lo invitaron. Fui en el helicóptero del estado porque se trataba de un acto relacionado con el gobierno
.
Con información de Silvia Chávez, corresponsal