La Cruz Roja Mexicana lamentó y condenó el homicidio cometido por grupos del crimen organizado contra la radio operadora en su delegación de Culiacán, Sinaloa, María Genoveva Rogers Lozoya, y solicitó la intervención de los tres órganos de gobierno para resguardar la vida de su personal.

En un comunicado, la institución puntualizó que agresiones como la que costó la vida de la trabajadora son reprobables y conminó a todos los sectores sociales y aquellos grupos que actúan al margen de la ley a que eviten agredir al personal de Cruz Roja Mexicana, porque quizá en alguna ocasión puedan solicitar sus servicios. Nadie está exento de necesitar una urgencia médica.

Al reiterar su condena contra las acciones violentas que atentan contra voluntarias y voluntarios de Cruz Roja Mexicana, pidió el esclarecimiento del homicidio de Rogers Lozoya.

Los servicios de emergencia y de hospitales trabajan ahora al 50 por ciento, y será el próximo miércoles cuando las labores se restablezcan en su totalidad en las delegaciones locales de Culiacán, Navolato, Quilá, Costa Rica y El Dorado.

Detalló que el personal de Cruz Roja Mexicana: paramédicos, socorristas, enfermeras y médicos, cumple con la misión de ofrecer atención eficiente a la población en casos de emergencia y en situaciones de desastre, aplicando los principios que rigen a la institución: neutralidad, imparcialidad, unidad, humanismo, voluntariado, universalidad e independencia.

Piden al gobierno estatal garantías en traslados e instalaciones

En Culiacán, el gobierno del estado anunció que dará seguridad a socorristas de la Cruz Roja y a las instalaciones que esta institución tiene en las diferentes regiones de la capital sinaloense, luego de que este domingo fue muerta a balazos una joven socorrista, de nombre Genoveva Roger, de 20 años, durante un ataque armado de un grupo de sicarios contra un lesionado.

Los socorristas realizaron una marcha este domingo para exigir al gobierno estatal garantías de seguridad en los traslados de lesiones de bala y también en las instalaciones, donde se atiende a enfermos y heridos; los inconformes, alrededor de medio centenar, junto con sus ambulancias, recorrieron la avenida Obregón, hasta el centro de la ciudad.

Ya mataron a uno de nosotros, ahora qué van a esperar?, ¿que maten a otro para que nos den seguridad?, preguntó uno de los manifestantes.

Jesús Aguilar Padilla, gobernador del estado, acudió a los funerales de la joven socorrista y ofreció el respaldo de su gobierno en las indagatorias del homicidio, que calificó de barbarie, así como para otorgar seguridad en las labores de los paramédicos y el resto del personal de la Cruz Roja.

Mientras, un centenar de agentes de Protección Civil, de la Secretaría de Seguridad Pública estatal y del Cuerpo de Bomberos suplieron a los socorristas en labores de auxilio, ante el paro de labores de éstos en protesta por el asesinato de una de sus integrantes.