Martes 2 de marzo de 2010, p. 25
Roma. Miles de trabajadores inmigrantes salieron este lunes a las calles de las principales ciudades italianas para protestar por la persecución gubernamental y en demanda de que se respeten sus derechos humanos. Los manifestantes, que contaron con el apoyo de los partidos políticos de izquierda, demandaron también el fin del racismo en contra de las comunidades de trabajadores indocumentados, y pidieron garantías para integrarse a la sociedad italiana. Entre las marchas más numerosas figuraron la de Nápoles, con 20 mil personas, y la de Bolonia, con 10 mil.