Un día después del fallecimiento del escritor Carlos Montemayor, el presidente Felipe Calderón externó de viva voz su pésame y recordó que el 15 de diciembre le había entregado el Premio Nacional de Ciencias y Artes sin haberse imaginado que estuviera tan enfermo.

El domingo pasado el mandatario federal no hizo pronunciamiento alguno durante su gira por Nayarit y no fue sino hasta las 19 horas que la Presidencia de la República emitió un comunicado de dos párrafos sobre el deceso del escritor y colaborador de La Jornada.

Ayer, al iniciar su discurso en el municipio de Tonanitla, estado de México, Calderón definió al autor de Guerra en el paraíso como un gran mexicano, un hombre de pensamiento, de letras, un importante rescatista e impulsor, por cierto, de la cultura y de la poesía náhuatl, de varias culturas precolombinas.

Antes de supervisar las obras del Túnel Emisor Oriente, relató que tuvo la fortuna de entregarle a Montemayor el máximo galardón que da el gobierno y señaló: No me hubiera imaginado que él hubiera estado tan seriamente enfermo y descanse en paz este gran mexicano.