Habría perecido en un accidente de tránsito, dice; hay 11 detenidos
Martes 16 de febrero de 2010, p. 28
Chilpancingo, Gro., 15 de febrero. Once elementos del 50 batallón de infantería están detenidos, como parte de la investigación sobre el asesinato a golpes del joven Juan Alberto Rodríguez Villa, de 18 años, perpetrado la noche del pasado viernes y del cual habitantes del municipio de Tlacotepec responsabilizan a efectivos del Ejército.
El comandante de la 35 Zona Militar, con sede en esta capital, el general Roberto de la Vega Díaz, acudió a la cabecera municipal de Tlacotepec (Heliodoro Castillo) para comunicar lo anterior al alcalde Olaguer Hernández Flores y a los familiares de la víctima, quienes pidieron una indagatoria transparente.
El mando castrense arribó a las 11 horas a bordo de una camioneta pick-up escoltada por cinco vehículos Hummer. Durante la reunión, en el ayuntamiento, dio a conocer la detención de 11 elementos del 50 batallón de infantería, con sede en Chilpancingo, entre ellos el teniente José Manuel González Gómez.
De la Vega Díaz dijo que la versión que él tiene es que los 11 soldados regresaban de destruir un sembradío de amapola y al salir de Tlacotepec (a 120 kilómetros de Chilpancingo) se toparon con un auto Volkswagen Beetle, presuntamente robado.
Al ver a los militares, los ocupantes de la unidad, Juan Alberto Rodríguez Villa y su amigo, Francisco Javier Martínez, de 16 años, intentaron huir, pero el auto chocó contra un árbol y Juan Alberto murió.
El general dijo no tener conocimiento de que los soldados estuvieran ebrios y agregó que con el desahogo de pruebas se sabrá si son culpables.
Sin embargo, Francisco Javier Martínez, el otro joven golpeado, afirmó que a las 20:30 horas del viernes los soldados los detuvieron; “nos subieron a un vehículo Hummer y empezaron a patearnos hasta dejarnos inconscientes. Nos pusieron las playeras en la cara y nos llevaron a un punto conocido como La Antena. Ahí nos pedían 50 mil pesos para seguir tomando”.
Agregó que les quitaron su dinero y teléfonos celulares, y les advirtieron que si se atrevían a denunciarlos los matarían, pues ya sabían donde vivían. Luego nos aventaron de un vehículo en movimiento.
Una amiga del joven asesinado dijo que los militares eran encabezados por el teniente N
Manzanares, pero el comandante de la 35 Zona Militar señaló que en su base de datos no existe ninguna persona con ese apellido.
Subrayó que no protegerá a delincuentes y pidió a los familiares de la víctima recabar toda la información sobre la supuesta agresión y presentarla al Ministerio Público.
Puntualizó que si se comprueba la culpabilidad de los militares se buscará reparar el daño, aunque ninguna cantidad (de dinero) devuelve la vida de un hijo
.
El general iba acompañado del mayor Francisco Javier Martínez, agente del Ministerio Público Militar, quien advirtió que si no se presentan los cargos en los plazos que marca la ley, los acusados quedarán libres.