Berlín, 11 de febrero. En la 60 edición del Festival de Cine de Berlín, si algo parece que quedará claro es que hay que aprender chino, debido a que abrió con Tuan Tuan.

Una agradable sorpresa en esta edición de la Berlinale es el protagonismo que ha adquirido la cinta mexicana Revolución. El cartel promocional acapara uno de los espacios en la Potsdamer Platz. De acuerdo con información del Instituto Mexicano de Cinematografía, está confirmada la presencia de los 10 directores mexicanos realizadores de dicha cinta.

En la entrada del hotel, donde se acreditaron los más de 400 periodistas y donde se alojan algunas de las estrellas de este festival, tres mujeres pedían limosna a los transeúntes: “¿habla inglés?, “do you speak english? o en alemán “sprechen sie Deutsch?”, mientras mostraban una tarjeta escrita en inglés que decía: soy serbia, necesito darle de comer a mis hijos; ayúdeme con lo que pueda, muchas gracias.

Berlín se viste de cine durante 10 días. Una gigantesca instalación de la artista coreano-estadunidense Christina Klim, realizada con materiales reciclados de la industria fílmica, cuelga como cortina de la puerta de Brandenburgo.

La restaurada cinta Metrópolis, de Fritz Lang, también será proyectada en una pantalla gigante en la que se considera el símbolo berlinés por excelencia.

También una exposición fotográfica con algunos de los participantes de las pasadas Berlinales se distribuyen en la ciudad.