El PRD fijó el 20 de noviembre próximo como fecha para valorar los alcances de conformar un partido único de la izquierda y, si es aceptada su propuesta por el PT y Convergencia, la someterá a votación de su congreso nacional en diciembre próximo.

La convocatoria no se limita a partidos políticos. Se extiende a organizaciones civiles, políticas, sindicales e intelectuales, ente otras.

Jesús Ortega, presidente nacional del PRD, reconoció que PT y Convergencia esperan una propuesta más específica y clara sobre los objetivos (que al respecto) se plantea el congreso nacional perredista y que de alguna manera serán expresados en la convocatoria que lanzaremos este 15 o 16 de septiembre, adelantó en entrevista.

Trabajaremos todo septiembre y octubre para el 20 de noviembre ver qué resultados hubo de esas pláticas, reuniones o consultas, de los intercambios con la diversidad de actores que participan en el campo democrático y de la izquierda. Desde luego, el congreso nacional de diciembre es el plazo mayor, advirtió.

En las reuniones de reconciliación que la semana pasada sostuvieron las dirigencias nacionales de los tres partidos, éstas coincidieron en restablecer alianzas electorales a partir de 2010 y hasta 2012, aunque en los comicios en puerta, Tabasco y Coahuila, irán separados.

En algunos casos, como Oaxaca, buscarán aliarse con otras fuerzas, sin descartar al panismo, para arrebatarle la gubernatura al PRI. Gabino Cué, de Convergencia, se perfila como el posible candidato.

Ortega Martínez y el senador Alejandro González Yáñez, de la Comisión Política Nacional del PT, establecieron –en entrevistas por separado– los fines que persiguen en esta etapa de relanzamiento de la alianza política entre los tres partidos que integran al Frente Amplio Progresista (FAP).

Buscamos, sostuvo Ortega Martínez, trabajar de manera conjunta desde el Legislativo (con el Frente Parlamentario de las Izquierdas) y perfilar acuerdos político-electorales en algunas entidades o regiones con candidaturas comunes.

González Yáñez destacó que la mejor forma de propiciar la unidad de izquierda y de las fuerzas progresistas en el país requiere de flexibilidad. Y a eso apuesta su partido para, junto con PRD y Convergencia, buscar modificaciones a la reforma electoral de 2007, que provocó división en el FAP.

La mejor forma es recuperar las figuras de candidaturas comunes, de las coaliciones e incluso mejorar el concepto de coalición de 2006, porque en ese año nos obligaron a ir con la misma declaración de principios y documentos básicos. ¡Es un exceso!, señaló.