Cultura y arte a raudales
■ El grupo vocal que dirige Konrad Junghänel se presentará el domingo 26 en Guanajuato
Cantus Cölln exploró en Amberes el diverso entramado polifónico de motetes y piezas sacras
Ampliar la imagen Konrad Junghänel, director del grupo vocal Cantus Cöll que vendrá a México Foto: Juan Arturo Brennan
Amberes, Bélgica. En esta vibrante y cosmopolita ciudad situada en los márgenes del río Schelde, el notable grupo vocal alemán Cantus Cölln concluyó una breve pero sustanciosa gira de cuatro conciertos ofrecidos en otros tantos países de Europa.
La presentación del ensamble, bajo la conducción de su fundador, el destacado laudista y director Konrad Junghänel, ocurrió en el Centro Musical Agustino, una antigua iglesia del centro de Amberes adaptada definitivamente como sala de conciertos.
Este recital de Cantus Cölln formó parte de uno de los más importantes festivales europeos de música antigua, Laus Poly-phoniae 08, que este año tuvo como hilo conductor un tema fascinante: la música en las ciudades de la Liga Hanseática.
Durante este admirable festival de música antigua, los grupos y solistas invitados interpretaron obras de compositores relacionados, de una u otra manera, con las urbes que formaron parte de esa importante asociación política y comercial, también conocida como la Hansa: Tallin, Turku, Danzig, Breslau, Copenhague, Hamburgo y Colonia, entre otras.
Con ese tema como línea esencial, Junghänel y sus músicos interpretaron un programa centrado en la actividad musical de la ciudad de Lübeck, proponiendo atractivas obras sacras de Palestrina, Andrea Gabrieli, Franz Tunder, Michael Tonsor y, por supuesto, Dietrich Buxtehude, quizá el músico más importante en la historia de esta urbe alemana.
En Sala Nezahualcóyotl, el día 30
A diferencia de los conciertos anteriores de la gira, Cantus Cölln se presentó en Amberes con una dotación relativamente reducida de seis voces, cuatro cuerdas y continuo. Fuerzas más que suficientes, sin duda, para las exquisitas interpretaciones de estos motetes renacentistas, cantados y tocados con claridad meridiana y balance perfecto, en el contexto de las que sin duda fueron las mejores condiciones acústicas del recorrido.
En el ámbito del desarrollo musical que va de Palestrina a Buxtehude (un siglo de distancia), Cantus Cölln optó siempre por una mesura dinámica y expresiva que le va muy bien a esta música, y exploró de manera detallada, casi puntillista, el diverso entramado polifónico de estos motetes y piezas sacras.
Unos días antes de su llegada a Amberes, Cantus Cölln tuvo un paso fugaz pero contundente por la curiosa, híbrida ciudad del norte de Italia conocida indistintamente como Bressanone o Brixen. En la enorme catedral de esta urbe enclavada al pie de los Alpes Dolomitas, Cantus Cölln realizó una versión formidable de la Misa en si menor, Bach.
Para este concierto, desaparecieron los cornetti, trombones y violas da gamba que habían acompañado en días anteriores a las Vísperas marianas, de Virgilio Mazzocchi, y llegaron flautas, oboes, fagotes, trompetas (naturales, por supuesto) y timbales, que junto con el contingente vocal ampliado de Cantus Cölln superaron con eficacia las difíciles condiciones de un espacio acústico muy abierto y hasta cierto punto desprotegido, para lograr una ejecución vibrante, resonante y expansiva de esta partitura, una de las cumbres de la historia de la música.
No está de más enfatizar, de nuevo, que la línea de conducta que lleva a Junghänel y Cantus Cölln a interpretar esta música (como lo hacen otros ensambles de nuestro tiempo) con una voz por parte, en lugar de las masivas aglomeraciones que fueron típicas hasta hace relativamente poco, produce una paleta sonora que nada pierde en riqueza y variedad, pero gana mucho en transparencia y nitidez.
Desde las arias más delicadas hasta los números que requieren al ensamble completo, el grupo privilegió esa individualidad de cada línea vocal e instrumental que ha sido su sello a lo largo de más de 20 años de trayectoria artística.
Cantus Cölln exhibirá toda esa riqueza musical durante su gira por México, el 26 de octubre en Guanajuato, en el Festival Internacional Cervantino, y el día 30 en la Sala Nezahualcóyotl.